Serán Miguel Angel Lemme y Alejandro Mancuso. Al menos por el partido ante Escocia. La mano de Carlos Bilardo en el conflicto. ¿Quién gana y quién pierde?
Por Roberto Aguirre Blanco
Según fuentes calificadas de la Asociación del Fútbol Argentino, Miguel Angel Lemme y Alejandro Mancuso serán los ayudantes de campo de Diego Maradona en el seleccionado nacional, al menos en el debut del miércoles próximo ante Escocia.
De esta manera, en una jornada distinta a la tensa vivida 24 horas antes, con amenazas mediáticas de “renuncia” y declaraciones poco felices sobre caras de personas que no son tan gratas para algunos, la designación de estos dos asistentes para Diego intenta descomprimir la primera crisis del nuevo DT en el seleccionado.
Lemme, un hombre del riñón de Bilardo, fue su ayudante de campo en su etapa en Estudiantes, es uno de los nombres que trajo a la mesa de negociación el “narigón” para destrabar la situación tensa creada por el pedido de Maradona de elegir como asistente a Oscar Ruggeri.
La figura de Lemme convenció tanto a Maradona como a Grondona, pero según pudo saber Asteriscos.Tv, el conflicto está lejos de resolverse, ya que el “Diez” no se saca de la cabeza el deseo de contar con Ruggeri.
Bilardo, en las últimas horas compartidas –viajaron juntos a Mar del Plata- convenció a Diego de la necesidad de salir de este conflicto al “menos por el momento”.
La designación de Mancuso, uno de los hombres de mayor confianza e influencia últimamente en la vida de Diego, nunca estuvo en discusión y sólo es una formalidad para estar en el cuerpo técnico de aquí hasta el último día que esté Maradona.
En este escenario, el ex jugador de Vélez y Boca cumple un rol clave para el “pelusa” y es una importante contención desde hace más de dos años en la vida del ex capitán del seleccionado.
Sin embargo, Lemme no es el hombre del perfil que quiere Maradona para ser su brazo derecho. El “Diez” necesita a alguien con “mucho peso y que le pueda manejar el vestuario”, señaló a Asteriscos.Tv una fuente cercana a la AFA.
A pesar de la ascendencia que tiene su figura “él sabe que ese es su punto débil: el control de los jugadores”, repitió otra fuente consultada.
Por lo cuál se desprende que luego del partido ante Escocia y hasta el próximo compromiso de 2009, habrá más tiempo para terminar de rearmar el grupo de colaboradores.
¿Ruggeri?, muy difícil mientras Grondona no cambie de opinión y el “Jefe” sabe que torcer esa posición ante Maradona sería ceder mucho de cara al futuro, cuando está claro que aquí hay una lucha de poderes detrás de la escena.
El ganador por ahora es Bilardo, quien tiene sus propias ambiciones dirigenciales y mira de reojo el eterno sillón de Don Julio, que después de 2010 podría quedar vacante.
Con Lemme, el doctor confirma que no da “puntada sin hilo”.