Dijo que "algunos todavía consideran que el sector público no debe interferir en ciertas cuestiones de la economía". Sostuvo que este gobierno "defiende la industria nacional"
La ministra de Economía, Felisa Miceli, ratificó hoy la política de "defensa de la industria nacional", y envió un tiro por elevación a su antecesor, Roberto Lavagna, al señalar que "algunos todavía consideran que el sector público no debe interferir en ciertas cuestiones de la economía".
Lavagna había advertido sobre la cada vez mayor injerencia del Estado en áreas que, a su juicio, no le competen.
Pero Miceli aseguró que el desde el Estado "estamos interfiriendo positivamente para defender un sector que se tiene que volver a desarrollar, a expandir y a crecer, y tener una superación de lo que pudo producir en el pasado", como es la producción de motos.
Además, enfatizó: "Entendemos el trabajo entre el sector público y el privado de esta manera, escuchando, razonando y solucionando problemas".
Miceli también aseguró que desde el Estado "no vamos a producir, pero sí generamos un camino, una vía, para que el sector privado invierta y desarrolle toda su capacidad, para que podamos tener una industria de motos y de motopartes como la que tienen los países que son más comeptitivos en este rubro".
Sobre las medidas en materia de importaciones, Miceli aclaró que el objetivo no es "subir los precios aprovechando un mercado cerrado y protegido", sino que la producción local "sea competitiva a nivel internacional".