Uno de los hijos de Osama bin Laden pidió asilo político en España y permanecía retenido en el aeropuerto madrileño de Barajas a la espera de la decisión de las autoridades, que se anunciará en aproximadamente 48 horas, según confirmó ayer el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.

El ministro aseguró que el solicitante, con pasaporte saudita, llegó el lunes a Madrid en un vuelo procedente de El Cairo y con destino a Marruecos, que hizo escala en la capital española. Bin Laden viajaba acompañado de su esposa, de nacionalidad británica.

Según Rubalcaba, se está aplicando un proceso que requiere un informe de organismos internacionales, concretamente de la ACNUR, la agencia de ayuda a refugiados de la ONU, aunque éste por sí solo no es vinculante.

En 48 horas, "el Ministerio dirá si le corresponde o no el asilo, independientemente de las consecuencias", aseguró el titular de Interior durante una conferenciade prensa. Según informaron diversos medios, se trata de Omar Osama bin Laden, uno de los 19 hijos del fundador de la red terrorista Al-Qaeda, y quien se declara contrario al terrorismo que practica su progenitor.

Bin Laden hijo ya había solicitado un visado de asilo en la embajada británica en El Cairo, pero éste no le fue concedido por temor a que el permiso genere "pánico social", consignó el diario Ambito Financiero.

En conversación telefónica con los medios su mujer, Zaina al-Sabah, antes conocida como Jane Felix-Browne, indicó que Bin Laden está en contacto con un abogado que la asesora en el proceso. "Tendremos una respuesta en unos días", dijo Al-Sabah, quien afirmó que recurrieron a España porque "no" se sienten "a salvo ni en Egipto ni en ningún país de la zona", Ella se encuentra en Madrid, pero no quiso precisar dónde. "No puedo hablar", dijo, "no quiero hablar hasta que este asunto se resuelva".

A Osama Bin Laden, el hombre más buscado del mundo, se lo culpa de los atentados del 11 de setiembre de 2001 contra Nueva York y Washington, que dejaron casi 3.000 muertos. Asimismo, los ataques del 11 de marzo de 2004 a los trenes de Madrid fueron perpetrados por una célula de la red Al-Qaeda en España. Según las autoridades, 191 personas perdieron la vida y 1.900 resultaron heridas.