"Las ganas de ganarle a España van a ser enormes, por la forma en que nos han ganado las últimas veces y en los amistosos, y además porque se juega el pasaje a una final. Qué más aliciente que ese", expresó un Ginóbili contento por el resultado obtenido ante Turquía en los cuartos de final.

El bahiense reconoció que el partido ante España será duro, pero mostró un halo de confianza para el gran duelo que se vivirá el próximo viernes en Saitama, por el Mundial de Japón 2006.

"Yo lo tomo como al revés. A mí me preocupa el hecho de jugar ante España porque es un gran equipo, pero todo lo que pasó antes nos puede llegar a jugar a favor. España está con el fantasma de que hace años amaga y amaga y no llega y juega contra nosotros -que nos mataron- y en el partido más importante de sus vidas, no lo van a querer perder. Así que eso nos puede llegar a jugar a favor, pero sabiendo que es un equipo que está en un nivel impresionante", aseveró "Manu".

Ginóbili agregó: "le tenemos mucho respeto a España, sabemos que se le puede ganar, pero hay que hacer un partido casi perfecto, molestándolos muchos, no dejándolos jugar mucho y teniendo una noche inspirada".

Ginóbili comentó que nunca pensó estar los últimos 15 minutos del encuentro "prácticamente sentado y disfrutando el juego".

"Hoy se mostró un equipo muy agresivo y determinado a no dejar jugar al rival. Volvimos a parecer al equipo de Indianápolis (Mundial 2002), que corría a todos por todos lados. Además tuvimos mucha variedad en el equipo y se siguió jugando a gran nivel. Fue un partido casi perfecto", opinó el multicampeón con San Antonio Spurs.