La vedette del milagro fue la más votada por el público. Pablito Ruiz dijo chau y no lloró. El efecto jazz salvó a la “Tota” y la Callejón. Ahora es tiempo del viejo oeste
Por Roberto Aguirre Blanco
Mariana De Melo fue salvada por el voto de público con el 52,3 por ciento y se quedó en “Bailando por un Sueño” en un duelo de Jazz donde quedó eliminado Pablo Ruiz y su soñadora paraguaya, quienes sumaron el 47,7 por ciento de los 300 mil votos que hubo en “Showmatch”.
De Melo, quien entró a último momento al repechaje en reemplazo de Sabrina Sabrok –la chica de la saliva fácil- ya lleva dos salvatajes consecutivos en el duelo y va camino a ser la heredera de Marcelo De Bellis y la “Tota” Santillán.
El jurado volvió a demostrar que quedan seducidos por el embrujo del eterno nominado, la “Tota” Santillán, quien nuevamente fue salvado por unanimidad y sigue saltando escollos a pesar de ser uno de los más limitados a la hora de bailar.
También fue salvada la vedette María Fernanda Callejón, quien entró hace dos semanas desde el repechaje y siente como un compromiso “moral” llegar a las finales: será por eso que llora como Magdalena cada vez que la salvan.
Tras este momento emotivo, donde el minuto a minuto trepó a 24 puntos, dio comienzo la nueva ronda de baile que esta semana le tocó country, justo ahora que en Estados Unidos sólo se piensa en salvatajes.
Con música del lejano oeste, imágenes de establos, paja y sombrero de cowboy, las parejas desfilaron con diferente suerte: se destacó la de Carolina “Pampita” Arhohain, Mónica Ferro y la sorprendente Jessica Cirio, quien se llevó puntaje perfecto.
Por su parte, Natalia Fassi fue la más floja en este baile de salón y parece que ni Clint Eastwood la podrá salvar de una sentencia casi cantada.
Uno de los momentos especiales de la noche fue la aparición de la nueva chica embarazada por un futbolista: Evangelina Anderson, ya retirada del concurso vio luz y pasó a saludar, para confesar que sufre mucho cuando a su pareja, Martín Demichelis, le tiran “del pelito” los rivales en un partido caliente.
Además, debió reconocer que aún no conoce mucho de la regla del offside y se puso colorada al recordar que gritó por más de cinco minutos el gol anulado que hizo su pareja sin darse cuenta que el juego continuó sin la convalidación del tanto. Tranquila, Eva, esa norma del juego hay árbitros que tampoco la manejan.
Su reemplazante, Eliana Guercio, tuvo una actuación aceptable y también allí confesó que está de novia con el ex arquero de Racing, Sergio Romero, y le prometió a Marcelo Tinelli que no se iba a embarazar, al menos antes de enero.
El animador reza a todos los santos que no se le caigan más participantes, se está quedando sin suplentes y además se le van los números que más venden en su programa.
A repartir anticonceptivos se ha dicho.