Un sobreviviente declaró en el juicio que competían para ver quién arrojaba más bengalas y que eso terminó desatando la tragedia que costó 194 vidas en el boliche de Once
El juicio por la tragedia en el boliche República Cromañón sigue deparando sorpresas.
Un sobreviviente destacó que había dos grupos que se llevaban "mal" y hacían "competencias" en los recitales.
Se repiten testimonios que indican que Chabán dijo que esa noche había más de seis mil personas.
El testigo se llama Federico, de 24 años, quien declaró en una nueva jornada del juicio por la tragedia de Cromañón del 30 de diciembre de 2004.
"Había dos grupos, 'La familia piojosa' y 'El fondo no fisura'. Sé que se llevaban mal, pero yo no era de ninguno. Por gente amiga, sé que había una suerte de competencia por las bengalas y la cantidad de banderas", dijo el testigo.
"Cada sector tenía un tema en el cual prendía muchas más bengalas", aunque dijo desconocer de cuáles se trataba.
Esta declaración coincide con lo que en su momento dijo el empresario Omar Chabán quien sostuvo que el incendio se produjo porque los fans del grupo tiraron gran cantidad de pirotecnia a la vez hacia el techo, en el marco de esa guerra que disputaban.
A pesar de que el defensor de Chabán insistió en detalles, el joven dijo que la noche de la tragedia no pudo identificar a esos grupos.
Luego recordó que Patricio Santos Fontanet, líder de la banda, les pidió que no tiraran bengalas y agregó: "Esto es una fiesta, hay elementos inflamables y podría ser un desastre".
Esa parte del testimonio no favorece la posición del cantante, porque tenía conocimiento e que podía haber un incendio. Federico repitió varias veces que el grupo "no incentivaba el uso de bengalas".
"Antes de Cromañón el uso de bengalas era algo cotidiano, no sólo con Callejeros, sino con La Renga, Los Piojos y la Bersuit, pero después no se prendió ninguna bengala más", aseguró.
Luego de la tragedia, Federico siguió yendo a los recitales del interior del país que daba Callejeros, y aclaró que "Pato ya no era el mismo arriba del escenario, ya no era tan carismático y le hablaba poco a la gente".
Federico vio como una candela arrojada al aire "pegó en una viga y alcanzó la media sombra" ante lo cual los músicos "pararon abruptamente de tocar" y el público comenzó a intentar salir del lugar.
El testigo apoyó su relato en una "maqueta virtual" que se utiliza por primera vez desde que comenzó el proceso ante el Tribunal Oral en lo Criminal 24 (TOC24).
Otra testigo, Karina, de 30 años dijo que poco antes del recital de la banda Chabán dijo: "Si este lugar se quema, 6.000 personas por esas dos puertas de mierda no van a salir", y explicó que el lugar estaba cerrado "por razones de seguridad", ya que había gente que no tenía entradas y quería ingresar.
“Para mí fue una predicción de lo que pasó cinco minutos más tarde", dijo.
"Cuando uno entra a un espectáculo, nadie le dice 'te vas a morir' y entonces me dio miedo y me quedé alerta", agregó la testigo ante el tribunal.
La joven dijo que vio "unas bolitas que empezaron a quemar la media sombra", pero cuando pretendió salir del lugar por las seis puertas que daban al hall "estaban cerradas" y demoraron "entre 15 ó 20 minutos en ser abiertas".
Luego, otro sobreviviente, Sergio, de 23 años, dijo que algunos chicos "entraban con bengalas en los pantalones después de pasar el control y las sacaban" parta encenderlas. Nadie revisaba nada, una vez adentro, puntualizó.