A pesar de las múltiples acusaciones, el cura denunció un complot en su contra de parte de la jueza de menores y agregó que ampliará su declaración "entre mañana y pasado"
Durante su extensa declaración en el juicio, el cura Julio César Grassi dijo que fue víctima de un complot encabezado por empresarios, funcionarios judiciales, periodistas y hasta Susana Giménez. Así justificó porqué lo están juzgando a él por abuso sexual y corrupción de menores. Pero ayer la palabra "complot" se le volvió en contra. Una jueza de Menores de Morón dijo que "hubo un complot, pero se hizo para beneficiar a Grassi".
Cecilia Drago es la titular del Juzgado de Menores N° 4 de Morón y tiene la tutela sobre "Ezequiel", uno de los tres jóvenes que denunció al cura por abuso.
"Ezequiel" fue protagonista involuntario de un incidente que ahora se está ventilando en el juicio. En noviembre de 2002, un mes después de que Telenoche Investiga difundiera las acusaciones contra el cura, varios medios difundieron la noticia de que "Ezequiel" se había retractado. Poco después se supo que había sido una maniobra encabezada por el ex abogado de Grassi, Miguel Angel Pierri, que consistió en hacerle firmar al chico un documento con preguntas y respuestas ya formuladas (él no sabía leer ni escribir), y difundir inmediatamente por todas las redacciones que se había retractado de su acusación contra el cura.
La maniobra involucró también a funcionarios judiciales. Un secretario de un juzgado de Menores irá a juicio por ese hecho junto a Pierri (quien ya estuvo preso 70 días por esa causa), y a dos jueces de Menores de Morón: Ricardo Oyama y Cristina Landolfi tienen pedido de jury de enjuiciamiento.
Pero el escrito finalmente fue declarado nulo e ilegal por la Cámara Civil de Morón.
Drago, que por entonces era secretaria de Oyama, declaró ayer en relación a la maniobra judicial que "lo que se hizo con ese chico fue un manoseo espantoso".
"Lo he visto a Grassi en tevé hablando de un complot en esta causa y creo que sí hubo un complot de jueces y abogados para favorecerlo a él", aseguró Drago.
"Ezequiel" declaró en el juicio la semana pasada y ratificó su denuncia contra el cura, al igual que "Gabriel" y "Luis".
A pesar de todo, ayer Grassi se mostró optimista. "Los testimonios fueron verdaderamente favorables y voy viendo cada vez más claramente mi absolución" dijo al entrar a la audiencia y agregó que ampliará su declaración "entre mañana y pasado".
Sobre la declaración de Drago, el sacerdote cuestionó su testimonio ya que, según aseguró, "mintió al Tribunal y tengo pruebas para demostrarlo".