El venezolano sostuvo que una funcionaria lo forzó en Aeroparque: "Si no firmaba el acta iba a estar en problemas", dijo en el estrado de Miami, y siguió disparando contra Uberti
A medida que avanza el juicio en Miami por los 800.000 dólares decomisados en el aeroparque Jorge Newbery, se acrecientan los indicios que afectan al entonces funcionario Claudio Uberti.
En su tercer día de declaraciones, el empresario Guido Alejandro Antonini Wilson declaró hoy que tuvo que admitir que el dinero era suyo porque una funcionaria de aduanas lo presionó, según informó AP.
Antonini Wilson manifestó ante el tribunal federal de Miami que después que los agentes de aduana descubrieron los 800.000 dólares que llevaba, le pidió reiteradas veces a las autoridades argentinas en el Aeroparque Metropolitano que llamaran a Claudio Uberti para que aclarara lo que había sucedido.
Uberti, que viajaba junto al "valijero" y otras siete personas en el avión privado rentado por el Gobierno, no le respondió los llamados.
El venezolano además sostuvo que una funcionaria le dijo que "si no firmaba el acta [de declaración de aduanas admitiendo que el dinero era suyo] iba a estar en problemas". Es la misma funcionaria, que aún no fue identificada, que le aseguró que "lo arreglaría todo".
Sigue el proceso. Por tercer día consecutivo, la atención del juicio que se lleva adelante en Miami por la valija con US$ 800.000 está centrada en el testimonio Antonini Wilson, que desde poco después de las 9 participa de la audiencia que lo tiene como protagonista.
El empresario venezolano responde las preguntas del fiscal Thomas Mulvihill y del abogado Ed Shohat, abogado de Franklin Durán, el único acusado del juicio que no se declaró culpable.
Uberti, acorralado. Ayer, Antonini aportó indicios que complican aún más a Claudio Uberti y a Victoria Bereziuk, el ex funcionario kirchnerista y su secretaria que viajaban con él en el avión que llegó desde Caracas con el dinero.
Puntualmente, el venezolano aseguró que la madrugada del 4 de agosto del año pasado, Uberti se fue de Aeroparque con una segunda valija en la que estarían los US$ 4,2 millones que, también según el testimonio de Antonini llegaron a Buenos Aires en aquel viaje.
Carta clave. Además, durante la audiencia, el fiscal desclasificó la carta que redactó el FBI, que firmó el "valijero" y que envió al presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
Las dos carillas de la carta exponen su versión de los hechos. Pero con una aclaración relevante que sólo trascendió ayer: la carta no fue idea de Antonini ni del FBI, sino que se la pidió el cónsul venezolano en Miami, Antonio Hernández Borgo. Fue él quien le reclamó, por iniciativa propia o de Caracas, que contara lo que había pasado.
La carta inició entonces su camino hacia Chávez por los canales formales hasta llegar a su destinatario, según le confirmó el jefe de inteligencia, el general Henry Rangel Silva.
Y lejos de desmentir su versión o sospechar una trampa, Caracas le comunicó que aceptaba todos sus pedidos. Es decir, US$ 2 millones, protección para su familia, documentos para justificar los US$ 800.000 y el cierre de la causa penal en la Argentina, con el consiguiente levantamiento del pedido de captura internacional que pesa sobre él.