El Gobierno Nacional, a través del ministro de Planificación, Julio de Vido, anunció el acuerdo entre el Estado y los privados. Aumenta el gas en casa y baja la garrafa
El Gobierno Nacional, a través del ministro de Planificación, Julio de Vido, anunció hoy el acuerdo entre el Estado y los privados para que el envase de 10 kilos de gas que usa la gente más pobre pase a costar $ 16, contra los hasta $ 40 actuales. La medida será retroactiva al 1° de septiembre.
Y confirmó que ese dinero saldrá de un aumento gradual a las clases medias y altas que oscilará entre el 10 y el 30 por ciento, lo que repercutirá en más de 3 millones de usuarios que tienen acceso a gas por redes. Y a eso se le sumará otro aporte que vendrá de un aumento del 10% a los comercios e industria.
Durante un acto desarrollado en la sede de la cartera de Economía, el funcionario nacional instó a gobernadores y jefes comunales a "militar" en pos del acuerdo de manera de garantizar el cumplimiento del precio de la garrafa social que se venderá en comercios y estaciones de servicios.
El acuerdo fue firmado por el Gobierno nacional, las empresas de gas licuado del petróleo y las cámaras de distribución y de comercialización del sector.
La solución que diagramaron los privados con la Secretaría de Energía es que parte del aumento tarifario que estaba destinado a mejorar los ingresos de las petroleras y de los productores de gas licuado (Mega, Refinor, las refinerías de combustible) vaya a un fondo fiduciario.
Y de allí salga el subsidio para las garrafas. Parten de un costo de venta de $ 25, que es inferior al precio que hoy mayormente pagan los consumidores. Y aseguran que los fraccionadores de garrafas recibirían un subsidio de $ 5,50 por cada envase, en tanto que los distribuidores se harán de $ 3,50 por cada una. Y las partes se comprometen a vender la garrafa a 16 pesos.
A cambio, las petroleras se llevaron la promesa de que ahora se trazará un "sendero de precios" que paute nuevas subas en el futuro.
El total del subsidio a las garrafas sumará $ 550 millones al año, estiman en el sector privado.