La débil situación económica hará crecer la deuda nacional y limitará el futuro crecimiento. La brecha de 2008 será más del doble que el de 2007 y trepará a 3% del PBI
Otra mancha más para el mandato de george W.Bush. A la débil situación económica y al fuerte incremento en los gastos del Estado, el actual presidente dejará al próximo gobierno norteamericano un déficit presupuestario de alrededor de 500 mil millones de dólares, después de haber recibido de manos de Bill Clinton, un histórico superávit de US$ 115 mil millones.
Un déficit de tal magnitud podría limitar severamente la agenda de la próxima adminitración, sea del demócrata Barack Obama o del republicano John McCain. Ambos han prometido miles de millones de dólares en recortes impositivos o más gastos.
El creciente déficit además hará crecer la deuda nacional y obstaculizará el futuro crecimiento económico, en especial si los legisladores son obligados a hacer frente a esas obligaciones con un aumento de impuestos.
El déficit de 2008 será más del doble que el de 2007 y trepará a 3% del PBI. Y si el próximo presidente sigue adelante con la política de recorte de impuestos de Bush el rojo podría crecer hasta 5% del Producto, según Peter Orszag, director de Presupuesto del Congreso.