Una productora europea instaló la primera Academia de Conquista y Seducción del país. Aseguran que pueden transformar a un ‘looser’ en un real ganador
Que un ´looser´(perdedor) se convierta en el fetiche de todas las mujeres ya no será un estereotipo de las películas que sueñan lo imposible. Ahora, una academia enseña las técnicas del levante.
La productora alemano-española Hotspot encontró en la Argentina el mercado necesario para abrir la primera Academia de Conquista y Seducción del país.
Según adelantó el diario El Cronista, por $ 300 por mes, para el curso inicial, y $ 420 para el avanzado, Mike Tasbaschek, productor ejecutivo de Levant Art, y un grupo conformado por un psicólogo, un músico, un físico y un mago intentarán convertir al looser cansado de rebotar con las mujeres en un hombre que, si quiere, puede transformarse en un verdadero ganador.
“Nosotros trabajamos en construir una personalidad que funcione como un imán para las mujeres y enseñamos un método altamente eficaz para entablar comunicación con ellas, y luego seducirlas”, explicó este especie de Will Smith de las Pampas en la película “Hitch: experto en seducción”.
Aunque una breve encuesta demostraría que a la mayoría de los que escuchan hablar sobre una academia de la conquista lo primero que se les ocurre es que los hombres buscan pulir sus habilidades para conseguir romances casuales. Sin embargo, en la academia se defienden asegurando que solo enseñan a “ser y actuar como a las mujeres les gusta”. El “especialista” afirma: “Entender profundamente a las mujeres y a nosotros mismos como hombres ayuda al desarrollo de relaciones menos superficiales”.
Respecto a los perfiles de participantes, parecería ser que no sólo los tímidos buscan en Levant Ar un lugar que los ayude a sortear sus miedos para enfrentarse a las mujeres. En su primer mes de vida, agosto, agotó las vacantes a los cursos con participantes en la franja que va de los 25 a los 35 años. Estos hombres distan de ser el típico perdedor, sino que son profesionales que, por dedicar tanto tiempo a su trabajo, han dejado de lado su vida de disfrute y recreación y han perdido, o nunca desarrollaron, sus habilidades sociales como sí su profesión.
El director de la productora afirmó que las técnicas que enseñan “son específicas para hombres, para entender y seducir mujeres”. No obstante, frente al pedido femenino, conformó un equipo de mujeres que están trabajando en la escuela de seducción femenina.