Europa, conmocionada por el supuesto complot islámico para hacer explotar aviones comerciales, está estudiando una colaboración más cercana de la policía, para mejorar la detección de explosivos líquidos.

Los ministros europeos, junto al comisario de justicia de la UE, Franco Frattini, discutieron ayer impulsar una investigación sobre explosivos líquidos y de otras clases, mejorar la seguridad del transporte y un intercambio de inteligencia.

Las propuestas sobre "detección de explosivos incluyen rastreo de detonadores comerciales y, particularmente, explosivos líquidos".

El funcionario de la UE explicó que propondrá extender a los vuelos dentro de la UE un esquema de intercambio de información de pasajeros que ya tiene con Estados Unidos, Canadá y Australia.

Los países de la UE también buscarán usar identificadores biométricos en las fronteras y aeropuertos, para acelerar la identificación de pasajeros a partir de sus huellas dactilares o iris, añadió.

La UE además tomará en cuenta una sugerencia del ministro del Interior francés, Nicolas Sarkozy, de establecer a nivel europeo equipos expertos en la lucha contra el terrorismo, para ayudar a los países del bloque en caso de necesidad.

Los ministros discutieron cómo combatir la radicalización de los musulmanes que viven en Europa.

Para contrarrestar ello, se están enfocando en el entrenamiento de imanes en el ámbito europeo, dijo.

Imanes de algunas mezquitas europeas fueron acusados de difundir posturas extremistas.

Las agencias de inteligencia de la UE se reunirán a fines de este mes, agregó Reid.