Desde hoy deberán pagar una tasa migratoria quienes quieran salir del país por vía terrestre, fluvial y marítima, con un costo de 5 pesos para los dos primeros casos, y de 30 pesos para el último.

De acuerdo con el decreto 1025/05, firmado por el presidente Néstor Kirchner y cuya instrumentación se pospuso en dos oportunidades, quedarán exentos de pagar la tasa el tránsito vecinal fronterizo terrestre, los turistas que se alojen en ciudades limítrofes de la Argentina y países vecinos y la navegación deportiva a vela.

Según la Dirección Nacional de Migraciones, el dinero recaudado será destinado a la incorporación de personal y material tecnológico que contribuya a mejorar los controles en los puestos fronterizos. "Algo que se ha duplicado en los últimos tres años", según indicaron desde ese organismo.

La polémica tasa migratoria, cuestionada desde los sectores del turismo, se aplicaba sólo en los vuelos internacionales y se extenderá así a los casos de transporte por vía terrestre, fluvial y marítimo. La instrumentación de la norma demoró varios meses hasta que la Dirección Nacional de Migraciones estableció las excepciones que limitan el pago sólo a turistas internacionales para evitar afectar el comercio y el turismo local o el tránsito de personas desde fronteras.

Luego de la entrada en vigor del nuevo esquema de tasas migratorias, deberán pagarla quienes se desplacen por vía terrestre, fluvial o marítima a lugares turísticos de países vecinos como Uruguay, Brasil, Chile, Bolivia y Paraguay. También continuarán pagando la tasa migratoria, como ocurría hasta ahora, los turistas que viajen por vía aérea a todos los destinos internacionales.

Oficialmente se indicó que "también se incluyen en la tasa migratoria los cruceros internacionales, que hasta ahora no pagaban".

Respecto de las exenciones, no abonarán este canon quienes vivan hasta a 50 kilómetros del paso fronterizo, tanto en la Argentina, como en Uruguay, Chile, Bolivia, Brasil y Paraguay. Es el denominado tránsito vecinal fronterizo, que incluye la mayoría de las salidas terrestres del país.

También están exceptuados los turistas alojados cerca del paso fronterizo, tanto de la Argentina como de países vecinos, como ocurre con las ciudades de Puerto Iguazú, Foz de Iguazú o Ciudad del Este, y quienes practiquen deporte de vela.

Quienes queden incluidos dentro de las excepciones señaladas recibirán una credencial por parte de la Dirección Nacional de Migraciones con sede en el puesto fronterizo donde se realice la salida.

Se tratará de la denominada "Tarjeta Facilitadora del Tránsito Turístico", que tendrá una validez de cinco días y habilitará un número ilimitado de cruces en ese tiempo, para lo que contará con un código que permita su lectura automática en puestos de control.