Marsans, el grupo empresario español, y los directivos de Aerolíneas Argentinas y Austral fueron denunciados por los delitos de administración fraudulenta y vaciamiento, a partir de una supuesta sobreventa de pasajes por alrededor de 140 millones de dólares.

La denuncia, de la que dio cuenta la agencia DyN y el diario La Nación, fue presentada por la abogada María Silvina Rumachella, patrocinada por su colega Norberto Caputo. Ambos son, además, querellantes en otra causa vinculada con las empresas aéreas: la que investiga el accidente de un avión de Austral en la localidad uruguaya de Fray Bentos, ocurrido en 1998, actualmente a estudio de la Cámara de Casación Penal.

Según la denuncia, a la que tuvo acceso La Nación.com, que recayó en el juzgado federal de Daniel Rafecas, una de las hipótesis es que la supuesta sobreventa obedeció a un vaciamiento artificial "por parte de los dueños de la sociedad española para una ecuación económica de la fuga".

"Debería investigarse si sabiendo que Aerolíneas Argentinas y Austral terminarían en manos del Estado argentino como consecuencia de los desmanejos empresariales se la obligó premeditadamente y adrede en forma abusiva al solo efecto de obtener un sustancial beneficio para que nuevamente el Estado tenga que pagar por una empresa que no vale lo que los españoles dicen que vale", sostiene la denuncia.

"Esta hipótesis pondría al descubierto una maniobra evidentemente dolosa con el objeto de estafar al Estado y después, quizá, expresar desde otro país transoceánico- que los argentinos somos ladrones y que no los dejamos seguir invirtiendo en nuestro país", añade el texto que reprodujo La Nación.com.

La otra hipótesis que plantea el escrito es que la supuesta sobreventa haya sido utilizada para "abonar los servicios profesionales de quienes representan en sede judicial en las causas contra directivos y ex directivos de las empresas".