El kirchnerista José Pampuro, que estuvo a un paso de convertirse en protagonista de la sesión que concluyó con el rechazo del Senado al proyecto con el que el Gobierno intentaba ratificar por ley las retenciones móviles, intentó minimizar el impacto del revés en el oficialismo, aunque admitió que generó "una minicrisis".

Como vicepresidente provisional del Senado, le hubiese tocado sustituir a Julio Cobos en la definición de la votación si el vicepresidente no bajaba al recinto en ese momento clave. Incluso, según pudo saber Clarín, hubo ofrecimientos a Cobos para que se quedara en su despacho y lo dejara a Pampuro a votar doble y así aprobar el texto del kirchnerismo. Pero Cobos fue al recinto.

Pese al voto del vicepresidente que terminó sellando el rechazo al proyecto, Pampuro aseguró que no considera a Cobos "un traidor", narra el diario Clarín en su portal web.

Y, aunque admitió que generó "una minicrisis", se empeñó en resaltar que no le atribuye "demasiada importancia" al revés legislativo. "Fue una derrota parlamentaria que cualquier partido o fracción política puede tener en cualquier lugar", expresó el senador en declaraciones a las radios Mitre y América.

Para el vicepresidente provisional del Senado, uno de los dirigentes que llegó al kirchnerismo desde el duhaldismo, ahora el oficialismo debe "rever por qué se perdió" y buscar "una nueva política que sume adhesiones y consensos".