El jefe de Gobierno porteño le reclamó a su antecesor que no opine sobre la actual gestión, luego de una serie de opiniones cruzadas
El jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman, reclamó que su antecesor en el cargo, Aníbal Ibarra, se llame "a silencio" y que no opine sobre su gestión.
"Yo no opino sobre cómo marchaba su gobierno, así que él tampoco debería opinar ahora", señaló Telerman, al apuntar contra Ibarra.
El mandatario porteño sostuvo en declaraciones a un matutino porteño que tanto él como Ibarra tienen "la obligación de ser prudentes" y remató: "él tiene que llamarse a silencio".
Telerman salió a cruzar a Ibarra, luego de que el ex mandatario cuestionara el nombramiento de Juan Pablo Schiavi como ministro de Obras Públicas de la Ciudad.
Ibarra recordó que Schiavi fue el jefe de campaña de Mauricio Macri durante la última campaña electoral.
En esa compulsa, la fórmula Ibarra-Telerman se enfrentó a la que componían Macri y Horacio Rodríguez Larreta.
Ibarra le había reclamado a Telerman, quien lo sucedió en el cargo luego de su destitución, que la gestión porteña tiene "la obligación de hacer un gobierno progresista" debido a que "es lo que la gente votó en 2003".
"Dijo que me estoy derechizando, pero a mí no me hizo progresista Ibarra. Yo no empecé a militar en política a mediados de los 80", señaló Telerman.
En los últimos días, el enfrentamiento entre Ibarra y Telerman se hizo abierto, luego de que funcionarios de la actual gestión acusaron al ex jefe de Gobierno de estar de detrás de la toma de viviendas en el Bajo Flores, en un complejo de departamentos del FONAVI.
En ese contexto, la ministra de Derechos Humanos y Sociales porteña, Gabriela Cerruti, dijo que "algunos que se dicen progresistas manejaron políticas clientelísticas en las áreas sociales".