La ciudad de Buenos Aires y la Quinta de Olivos fueron escenario hoy de "cacelorazos" y otras manifestaciones de protesta contra el Gobierno, tras la detención del dirigente ruralista Alfredo De Angeli.

Las pancartas, cacerolas y cánticos fueron utilizados por un grupo de manifestantes que cortó la avenida Maipú por algunos minutos para protestar frente a la quinta presidencial, al mismo tiempo que la mandataria Cristina Kirchner analizaba los hechos
junto a varios de sus ministros.

Por la tarde, también se registraron "cacelorazos", principalmente en la zona norte de la Capital Federal, y en puntos específicos como Callao y Santa Fe, y Cabildo y Juramento, en el barrio de Belgrano.

En tanto, una columna se dirigió a la Plaza de Mayo, que se pobló de banderas argentinas y consignas contra el Gobierno, pero las expresiones se disiparon cuando se acercaron al histórico solar grupos oficialistas liderados por el dirigente piquetero
Luis D'Elía y el secretario de Comercio, Guillermo Moreno.

En ese momento, los manifestantes opositores optaron por retirarse y no se registraron choques de importancia, más allá de algún cruce verbal.