Debió precisarlo el primer ministro libanés, Fouad Siniora, quien había dado mal la cifra del bombardeo sobre el sur del país. Los ataques continúan
La guerra enloquece, o al menos distorsiona muchos hechos.
El primer ministro libanés, Fuad Siniora, declaró que una persona y no 40, como había anunciado previamente, murió en un bombardeo israelí en la localidad de Hula, en el sur de Líbano.
"Ahora se sabe que murió una persona. Creímos que todo el inmueble se había hundido sobre 40 personas. Gracias a Dios se salvaron", señaló Siniora durante una rueda de prensa tras una reunión de los ministros de Relaciones Exteriores de la Liga Arabe en Beirut.
La policía que se encontraba en el terreno precisó que 65 personas fueron halladas con vida en un refugio tras el bombardeo. En la apertura de la reunión, el mismo Siniora había acusado a Israel de haber dado a muerte a 40 personas en Hula en un "bombardeo deliberado".
Por otro lado, en Tiro, los aviones israelíes bombardearon un complejo de apartamentos y mataron a por lo menos cinco personas, dijeron testigos y rescatistas.
Asimismo, los aviones israelíes bombardearon esta madrugada los barrios del sur de Beirut, Nabatiye, el valle de la Beka y una aldea cercana a Sidón.
"Los aviones dispararon de madrugada contra una casa en la que dormían ocho personas de la misma familia. Seis han muerto y dos han sido rescatadas con vida", informaron fuentes libanesas.
También la ciudad de Nabatiye, bastión de Hezbollah, sufrió durante la pasada noche y el amanecer de hoy los bombardeos de la aviación israelí, que causaron cuatro víctimas mortales, según fuentes de la televisión libanesa LBC.
Asimismo, la aviación israelí castigó de nuevo los barrios sur de la capital del país, donde esta madrugada se escucharon cinco fuertes explosiones. Los proyectiles impactaron contra edificios de Haret Reik, Dajie y Ruweiss, cercanos al dañado aeropuerto internacional de Beirut.