Por Adrián Taccone

Apoyado en la pequeña gran figura de Diego Buonanotte,River se coronó este domingo campeón del torneo Clausura del fútbol argentino al vencer a Olimpo de Bahía Blanca por 2-1, y se benefició por el empate sin goles de Estudiantes de La Plata con Colón de Santa Fe, para alzarse con un título luego de cuatro años.

Los goles conjunto "millonario" fueron convertidos por Diego Buonanotte (16m y 78m), mientras que Josemir Lujambio (66m), había marcado el empate transitorio para los hombres de Bahía Blanca.

Este es el título número 33 que logra River en el fútbol argentino.

River salió decidido a buscar el partido ante Olimpo, un equipo que sin embargo le planteó el cotejo de igual a igual, dado que estaba necesitado de los tres puntos.

Con la movilidad de Ariel Ortega como enganche, más el aporte de Buonanotte y los delanteros Abreu y Falcao, River se instaló en el campo de Olimpo, que apostó al contragolpe con la velocidad de Olivi y la experiencia de Lujambio en el ataque.

Si bien el planteo era abierto por parte de ambos, las acciones ante los arcos no fueron claras, por defectos propios en la definición y también por alguna falta de eficacia en los últimos metros.

Debió ser una jugada preparada -y de pelota parada- la que le permita a River abrir el marcador, cuando Abelairas tomó un tiro libre en la izquierda y tocó para Buonanotte, que acarició el balón con la parte interna de su botín izquierdo para colocar el balón lejos del alcance de Ramírez.

El Monumental explotó y los hinchas de River comenzaron a vivir lo que era el preludio de una nueva consagración.

El asedio "millonario" no se detuvo y el arquero Ramírez debió esforzarse en dos ocasiones para salvar su valla, primero con un remate de Buonanotte y luego ante un disparo de Ahumada.

Antes de terminar el primer tiempo River se mostraba como un equipo con variantes y decidido a buscar un gol que le permita estar un poco más tranquilo, pero la capacidad de Ramírez para defender su valla complicó las aspiraciones locales.

Incluso el uruguayo Sebastián Abreu se perdió un gol increíble frente al arco vacío, luego que Ramírez le tapó de manera espléndida un cabezazo a Falcao.

En el complemento River siguió con el mismo libreto, abriendo el juego y buscando variantes para poder seguir el acoso a la valla de Olimpo, mientras que los bahienses sólo tuvieron a un Olivi movedizo y un Lujambio expectante.

Un remate de Ortega que tapó Ramírez, y otro de Buonanotte que se fue cerca, estuvieron a punto de aumentar la cuenta.

Sin embago, la sorpresa se hizo presente en el Monumental, cuando Olivi cruzó un balón al área, le quedó a Lujambio, y el uruguayo definió de manera espectacular para colocar el 1-1.

El público "millonario" sintió el impacto, pero acordándose de las palabras de Ahumada, comenzaron a alentar al equipo que fue con más impetu que antes y así llegó a la victoria.

Una estupenda triangulación entre Falcao, Ortega y Buonanotte terminó con una estupenda definición de derecha del "chiquitín" que superó la línea de Ramírez, para desatar la alegría de las casi 50 mil personas que estaban en el estadio Monumental.

Sin embargo, Olimpo fue a buscar el empate -necesitado por los puntos para el promedio del descenso- y tuvo alguna chance, aunque algo confuso, y luego no pudo aguantar la presión de River, que le manejó el balón.

Con el 2-1 final, el plantel y los hinchas se quedaron esperando el final del partido
de Estudiantes con Colón, que terminó empatado en cero y desató la alegría "millonaria".