El jefe de Gabinete criticó la respuesta de los ruralistas a las modificaciones en el esquema y recordó que es "exactamente lo que ellos habían planteado". Se tensa el conflicto
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, salió a responder con dureza las críticas que la dirigencia rural hizo a las modificaciones que este jueves anunció el Gobierno a las retenciones móviles.
Visiblemente molesto, el jefe de Gabinete afirmó por Radio América que "ahora resulta que todo esto es innecesario porque la soja no va a subir sino que va bajar. Si la soja baja, va a bajar también la retención. Esto es exclusivamente porque tienen que pagar 4 ó 5 puntos más de retenciones, no un 50%”, agregó Fernández.
Sobre la actitud de los dirigentes del sector agropecuario, afirmó: “Es mentira que quieran dialogar, es absolutamente falso que quieran dialogar”, fustigó el funcionario, que al respecto agregó: “Escucho que ahora dicen que es una medida inconsulta. ¿Qué son, cogobierno?
El jefe de Gabinete señaló además que los ruralistas construyeron una “falacia llamando a confusión a toda la Argentina y protegiendo la rentabilidad”.
Además, Fernández aseguró que en cuanto a la producción agropecuaria “tenemos una oportunidad increíble”. “Tenemos 10 años por delante con una demanda sostenida de granos y oleaginosas porque el mundo está buscando alimentos”, explicó.
“De Angeli (titular de la Federación Agraria de Entre Ríos) quiere volver a la situación que tenía el 10 de mayo y ya está en la situación que tenía el 10 de mayo, que es lo que está pidiendo”, dijo el jefe de ministros.
Finalmente, afirmó: “El Gobierno no tiene contraparte y no es contraparte del campo”.
“No estamos solamente defendiendo una mejor red del ingreso, sino también poner un poco de orden sobre el desarrollo del campo”, afirmó.
Y concluyó: “Tenemos que corregir cosas. Hoy en días solamente podemos exportar 2 de cada 10 vacas que se producen y 1 de cada 10 litros de leche. El resto se consume acá. Hay que aumentar la producción.”