El pez por la boca muere, y esta vez a los que les salió mal la coartada es a los travestis que acusaron al jugador del Milán, Ronaldo, de haberlos "usado" para tener sexo y no haberles pagado, además de acusarlo de "mandarlos a comprar droga".

El comisario Carlos Augusto Nogueira, quien está a cargo del caso, aseguró que los travestis dijeron estar "arrepentidos" de lo que hicieron.

"Confesaron que mintieron sobre todo lo que dijeron hasta ahora. No hubo droga ni sexo aquella noche entre ellos", afirmó Nogueira.

En este sentido, el policía dio más datos: "Contaron que inventaron todo porque no consiguieron recibir el dinero que pretendían con el intento de extorsión".

Nogueira dijo que "es probable" que el travesti que levantó todo el revuelo, Andréia Albertino, sea acusado por robo y amenazas.