El ex director de Franquicias Jorge José Matas será sometido a indagatoria por permitir el uso de autos para diplomáticos por parte de personas no autorizadas
Un nuevo involucrado en la causa que investiga la entrada al país de autos truchos con la autorización de patentes diplomáticas, deberá visitar Comodoro Py en poco tiempo.
Un fiscal federal solicitó que el ex director de Franquicias de Cancillería, Jorge José Matas, sea sometido a declaración indagatoria por permitir el uso de autos para diplomáticos por parte de personas no autorizadas.
Otro juez, Norberto Oyarbide, ya decidió interrogarlo en el marco de un expediente más nuevo sobre el mismo escándalo de los autos truchos; el lunes 11 de abril, Matas deberá defenderse de cargos delicados como el de asociación ilícita, adelantó el diario Clarín.
El pedido que formuló ahora el fiscal Gerardo Pollicita es por el posible delito más leve de incumplimiento de los deberes de funcionario.
En su dictamen, el fiscal relató el rol clave que Matas cumplía en todo esto, autorizando las importaciones y facilitando credenciales. Esta investigación (número 9.547/07) se refiere a un BMW 530D, un BMW 330D y un Peugeot 406 utilizados por tres personas de apellido Rodríguez: Pablo Rodolfo, José Evaristo y Nicolás Evaristo.
La primera irregularidad detectada fue que el primero de los Rodríguez andaba en un auto de la embajada de Rusia que había sido secuestrado en una causa por contrabando por la Justicia federal de Campana.
Pollicita sostuvo que para usar este coche, "sin ser chofer, diplomático ni funcionario", Rodríguez tenía una credencial otorgada precisamente por la oficina que conducía Matas. La denuncia original había sido presentada por dos personas de apellido Clementi, Edgar Omar y Edgar Gustavo, hace casi un año.
El requerimiento no abarca a los Rodríguez ni a funcionarios de ninguna embajada. Con autos de las de Bielorrusia y Cuba, por ejemplo, se habrían detectado las mismas anomalías.
La causa que lleva adelante Oyarbide (la 607/08) avanza a partir de una auditoría interna de la Cancillería. Matas es sólo uno de los imputados; otro es Marcelo Pujó, director de Ceremonial, que tuvo que dejar su cargo.