Sería autoría de Hamas. Dos palestinos ingresaron con armas y explosivos. Hasta el momento hay al menos diez muertos y 35 heridos, pero las cifras podrían aumentar
Al menos diez personas murieron y 35 resultaron heridas esta tarde en un ataque de un grupo armado en el comedor de la escuela rabínica de Merkaz Harav, en el oeste de la ciudad de Jerusalén.
Los atacantes, aparentemente vestidos con ropa de judíos ortodoxos y munidos de cinturones cargados con explosivos, se infiltraron en el salón comedor del seminario religioso donde dispararon a mansalva contra 80 estudiantes religiosos, informó el diario israelí Haaretz.
El diario Jerusalem Post informó que los atacantes dispararon entre 500 y 600 balas contra los alumnos en el lapso de 10 minutos.
Testigos del ataque dijeron que a consecuencia del atentado y su inmediata represión murieron dos atacantes palestinos y ocho estudiantes del seminario religioso (yeshivá en hebreo), el más importante de la zona occidental de Jerusalén.
Los servicios de seguridad israelíes presumen que un tercer atacante logró escapar e iniciaron una intensa búsqueda en el barrio de Kiryat Moshe, donde está ubicada la escuela,
"Lo que se ve en el interior del colegio rabínico es la escena de una verdadera masacre. Las paredes están manchadas de sangre pero también los pisos y los cadáveres están esparcidos por las habitaciones y los corredores", relató un testigo citado por al agencia italiana ANSA.
Fuentes sanitarias informaron que varios de los jóvenes heridos fueron trasladados en grave estado a hospitales cercanos y que a la zona llegaron unas 50 ambulancias para atender a las víctimas.
Los medios israelíes interpretaron que el brutal ataque fue una "represalia" palestina contra la ofensiva militar israelí de la semana pasada en la Franja de Gaza que causó la muerte de 125 palestinos.
La yeshivá de Merkaz Harav es una escuela de estudios bíblicos y talmúdicos, a la que algunos observadores le adjudican una ideología ultraconservadora.
La noticia del atentado fue recibida con fuegos de artificio en la Franja de Gaza donde miles de personas salieron a las calles disparando al aire ráfagas de ametralladoras.
Aunque Hamas no se atribuyó el ataque, uno de sus voceros dijo que "ésta es la respuesta natural contra la agresión sionista realizada contra el pueblo palestino, y no será la última".