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21 de noviembre de 2024
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Crisis energética: cada presidente atiende su juego
Luego de las fracasadas reuniones, Lula destacó la "solidaridad" entre los países, pero limitó la ayuda. Bolivia prometió ayuda sólo si hay "problemas graves"
25 de febrero de 2008
Los presidentes de la Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, y de Brasil, Luiz Inacio ’Lula’ da Silva, acordaron acelerar los tiempos de las obras de infraestructura que permitirán incrementar la oferta energética de ambos países, según afirmó este lunes el asesor brasileño para temas internacionales, Marco Aurelio García.

García precisó que en la reunión de trabajo del sábado pasado en la quinta presidencial de Olivos "se discutió que estos problemas no pueden ser vistos en la perspectiva de corto plazo, porque si no todos los años habremos de reunirnos para constatar que habrá problemas en el invierno o en el verano".

"Lo que se ha decidido es que los tres ministros (de la Argentina, Brasil y Bolivia) del área energética coordinen una acción para apresurar los proyectos estratégicos que vayan a resolver estas cuestiones", agregó García en declaraciones a Radio América.

Apuntó que, en concreto, "la presidenta Cristina y Lula decidieron acortar los plazos de la isla eléctrica de Garabí".

"Los plazos -de esa obra- estaban muy largos. Lula y Cristina decidieron acortar eso", dijo García.

Además de destacar como un "avance" la creación de la comisión de ministros que buscarán alternativas para satisfacer la demanda, remarcó que la escasez de energía "refleja una situación extremadamente positiva: que los tres países crecen y la infraestructura que nos viene del pasado era para países de crecimiento muy modesto, cuando no de recesión".

por su parte, el presidente de Bolivia, Evo Morales, adelantó que de haber "problemas graves" de energía, su país estaría dispuesto a ayudar a Argentina.

"Hubo un acuerdo entre los presidentes (de Argentina y Brasil) acompañado por nuestras empresas estatales", remarcó el mandatario; y adelantó que "esto significa que si Brasil tuviera problemas graves de energía, todos debemos apoyar. Si Bolivia lo tuviera, igual. Y si hubiera un problema muy serio en la Argentina, debemos ver cómo dar nuestra parte cada uno para resolver sus problemas".

Medios internacionales indicaron que la próxima reunión de la comisión creada el sábado será a fines de marzo en la capital de Bolivia, La Paz.