El vice de la SRA, Hugo Biolcati, calificó a la prórroga del régimen como una "represalia" por los reclamos del sector agropecuario
Se inauguró esta mañana la muestra ganadera que organiza anualmente la Sociedad Rural Argentina (SRA), con un discurso que mezcló buenos augurios y críticas al gobierno por la extensión de las retenciones a los lácteos.
El vice de la SRA, Hugo Biolcati, calificó de "represalia" del gobierno a la prórroga de las retenciones, ante los reclamos del sector agropecuario.
El subsecretario de Agricultura, Javier de Urquiza, fue el representante del gobierno nacional en la apertura, ya que no asistió el secretario del área, Miguel Campos.
El presidente de la SRA, Luciano Miguens, fue el más conciliador al hablar del "nuevo esfuerzo" del sector agropecuario "para continuar apoyando al país".
Del corte de cintas también participó el jefe de Gobierno porteño, Jorge Telerman. Previo a la recorrida por el predio que realizaron los dirigentes y funcionarios, Miguens dijo que "se debe reconocer que el campo atraviesa un momento muy difícil, por lo cual los productores necesitan canalizar su malestar y expresarse", en referencia al inminente paro agropecuario que, convocado por Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), comenzara el sábado próximo y se extenderá hasta el martes 25 en todo el país.
El dirigente recordó, además, que la SRA "respeta" la medida de fuerza impulsada por el ruralismo confederado, así como que dejo en "libertad de acción" a sus afiliados para que decidan su adhesión o no a la protesta.
Si Miguens fue conciliador, Biolcati hizo escuchar la voz crítica al calificar de "represalia" del Gobierno a la decisión de extender por dos meses más los porcentajes de retenciones que se aplican a las exportaciones de productos lácteos.
"En este Palermo 06 se repiten las represalias al sector tambero", acotó el dirigente, en alusión a la medida dispuesta por el Ministerio de Economía el 22 de julio de 2005, dos días después de la apertura de la muestra rural, cuando se elevaron del 5 al 15 por ciento los gravámenes a las ventas de leche en polvo al exterior y del 5 al 10 por ciento las de quesos.