Más de 100.000 personas protestan en el centro de Belgrado contra la independencia de Kosovo, situación que ha generado actos de vandalismo y violencia como por ejemplo el incendio provocado en la embajada de Estados Unidos en Serbia.

La sede diplomática fue incendiada hoy por manifestantes que atacaron en conjunto, en protesta por el apoyo estadounidense a la independencia de la ex provincia serbia de Kosovo.

Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, prendieron fuego a un puesto de vigilancia y reemplazaron la bandera norteamericana por la de Serbia

Embajador a salvo. "Mientras un grupo de manifestantes logró ingresar en la sección consular de la embajada, ni el embajador, ni ningún empleado se encontraba en su interior", precisó en Washington el portavoz del departamento de Estado, Sean McCornack.

Al menos diez vehículos blindados de la policía y varias decenas de agentes llegaron al lugar para dispersar a los manifestantes utilizando gases lacrimógenos.

Numerosos manifestantes, en su mayoría hinchas de fútbol violentos, fueron detenidos mientras camiones de bomberos llegaban al lugar.

Otros incidentes tuvieron lugar cerca de la embajada de Croacia y en una de las principales avenidas de la capital, la plaza Slavia, donde los manifestantes lanzaron bengalas y rompieron cristales.

Acusación serbia. El primer ministro serbio Vojislav Kostunica, acusó a los países occidentales que reconocieron la independencia de Kosovo de querer "humillar a Serbia" y afirmó "Kosovo es el primer nombre de Serbia, y pertenece a Serbia y al pueblo serbio, como ha sido y será para siempre".

También pudo verse banderas de España y de Rumania, dos miembros de la Unión Europea que no reconocieron al nuevo Estado.

Otros enarbolaban banderas de Rusia, el gran aliado de Belgrado, que hizo causa común con Serbia en su rechazo a la independencia de Kosovo. El gran ausente del acto será el presidente serbio Boris Tadic, de visita en Rumanía.

Incidentes en un puesto fronterizo. Varios centenares de reservistas del ejército serbio apedrearon a la policía y las fuerzas de la OTAN al entrar en Kosovo, durante un enfrentamiento en un control fronterizo.

Los manifestantes, en su mayoría uniformados, lanzaron piedras y quemaron neumáticos antes de saltar el control fronterizo de Merdare, a unos 50 kilómetros al noreste de la capital de Kosovo, Pristina.

La policía de las Naciones Unidas dijo que los manifestantes, ex combatientes del bando serbio durante la guerra de Kosovo de 1998 a 1999, llegaron procedentes de la aldea serbia de Kursumlija en autobuses y trajeron una topadora.

Varios centenares de soldados checos pertenecientes a las fuerzas de la OTAN fueron desplegados en el lugar.

Los serbios, molestos por la declaración de independencia de Kosovo, incendiaron a principios de esta semana otro control fronterizo.