Dijo que fue provocada por la crisis en el sistema financiero. Llevará un déficit presupuestario más alto. Anunció plan de gastos por US$ 3100 millones para el año fiscal 2009
El presidente estadounidense, George W. Bush, reconoció hoy que la desaceleración de la economía, provocada por la crisis en el sistema finaciero, llevará un déficit presupuestario más alto, al revelar un plan de gastos por 3100 millones de dólares para el año fiscal 2009 que casi congela varios programas domésticos.
El presupuesto se centra en el gasto militar y la guerra de Irak, al proponer un incremento de 7,5% para el Pentágono, a 515.000 millones de dólares. Aparte de eso, Bush también pidió 70.000 millones de dólares más para los conflictos de Irak y Afganistán.
En un panorama que, según los demócratas, incluso podría subestimar el grado de los problemas fiscales, Bush pronosticó un déficit de 410.000 millones de dólares para el año presupuestario 2008 que termina el 30 de septiembre, y otro de 407.000 millones de dólares para el año fiscal 2009 que empieza el 1 de octubre.
Esos déficit son más del doble que la brecha de 162.000 millones de dólares de 2007, y se acercarían al récord histórico de 413.000 millones de dólares registrado en el 2004. Esta situación presupuestaria más desfavorable será heredada por el próximo presidente, que asumirá en enero del 2009.
Con la economía posiblemente al borde de una recesión, se prevé que la recaudación de impuestos se verá afectada, revirtiendo una tendencia de los últimos tres años en la que los déficit anuales se reducían.
Los gastos. El paquete de estímulo prometido por 150.000 millones de dólares, que incluye devoluciones de impuestos para impulsar el consumo, aumentará los déficit, al menos a corto plazo, y el financiamiento de la guerra de Irak es otra fuente de gastos grandes.
"La razón principal del incremento de los déficit en el corto plazo es el paquete de crecimiento económico del presidente y una prevista desaceleración del crecimiento de la recaudación, debido a una proyectada reducción de la recaudación del impuesto corporativo desde los recientes niveles altos", dijo el documento del presupuesto.
Algunos críticos dicen que los déficit presupuestarios reales podrían ser todavía mayores, observando que las predicciones económicas usadas para calcular el presupuesto de Bush son más optimistas que las del sector privado, y que el plan de gastos incluye sólo una parte de las necesidades de financiamiento previstas para la guerra de Irak en el 2009.
Cuando el fin de semana comenzaron a filtrarse los detalles del presupuesto, los demócratas criticaron a Bush por el giro en las cuentas públicas, del superávit al déficit, desde que asumió la presidencia.
"El presupuesto de hoy tiene todos los rasgos del legado de Bush: lleva a más déficit, más deuda, más recortes de impuestos, más reducciones de servicios críticos", dijo el presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Representantes del Congreso, John Spratt, un demócrata de Carolina del Sur.
Además de congelar decenas de programas, Bush propuso recortar en un 22% el financiamiento del programa que ayuda a que las familias pobres puedan pagar la calefacción doméstica, y reducir la asistencia para el servicio de trenes de pasajeros Amtrak, en casi 34%.