Una nueva jornada de violencia dejó por lo menos 60 muertos en Irak entre víctimas de atentados terroristas y ataques perpetrados por civiles armados.

El hecho más grave se registró por la noche en un café frecuentado por shiítas de la ciudad de Tuz Jormato, unos 200 kilómetros al noreste de Bagdad, en el que se inmoló un terrorista. Según la policía, el ataque dejó 25 muertos y cerca de una treintena de heridos.

En otro atentado con numerosas víctimas, ocho personas fallecieron y doce resultaron heridas en un concurrido mercado bagdadí, mientras que otros atentados y ataques armados en la capital y las ciudades de Tikrit, Kirkuk, Bakuba t Al-Musayeb perecieron otras 27 personas.

En tanto, seis de unos 30 rehenes tomados en una reunión del Comité Olímpico iraquí fueron liberados, con los ojos tapados pero ilesos, en el barrio bagdadí de Baladiyat.

Hasta el momento, no hubo más información sobre los otros rehenes, entre quienes se encuentra el presidente del comité, Ahmed Al Hijiya. Las víctimas fueron capturadas el sábado en un ataque a plena luz del día en el corazón de Bagdad.