Islamistas indios en la mira
Por atentados a trenes de Bombay que ya costaron 190 muertos y provocaron más de 700 heridos. Apuntan al Movimiento Estudiantil Islámico de India, prohibido en el país desde 2001
12 de julio de 2006
La policía buscaba intensamente a los autores de los atentados que el martes dejaron al menos 190 muertos en Bombay, la capital financiera de India, afirmando en privado que las sospechas se dirigían a los insurgentes islamistas.
El balance de estos siete atentados cometidos en forma casi simultánea en trenes y estaciones de Bombay y sus suburbios llegó a 190 muertos y 714 heridos, según un alto responsable de la policía local, P. S. Pasricha.
Los investigadores buscaban indicios que les permitieran seguir el rastro de los autores de estos ataques.
Estos atentados, los más sangrientos de los últimos años en India, no fueron reivindicados y públicamente las autoridades indias se limitaron a atribuirlos a "terroristas".
"En esta etapa no tenemos informaciones que vinculen las explosiones a un grupo particular", dijo un alto responsable del gobierno regional de Maharashtra, cuya capital es Bombay, D.K. Sankaran.
"Fue una operación bien coordinada y bien preparada, y parece que una potencia importante está detrás de todo esto", declaró a la televisión K. P. Raghuvanshi, el jefe de la brigada antiterrorista de la policía de Bombay encargada de la investigación.
No obstante, en privado responsables indios dijeron a la prensa local que las sospechas se dirigían a los rebeldes islamistas, tal como sucedió después de los atentados cometidos también en forma casi simultánea en Benarés (norte) en marzo (23 muertos) y Nueva Delhi en octubre (66 muertos).
Según altos funcionarios de los servicios de inteligencia que solicitaron el anonimato, citados por The Times of India, la policía investiga las relaciones entre un grupo islamista, el Movimiento Estudiantil Islámico de India (MEII), prohibido en el país desde 2001.
También se investiga una pista que conduciría al grupo radical extremista islamista Lashkar-e-Taiba, cuya sede se encuentra en Pakistán y que opera en el Cachemira indio, pero la policía espera el informe de los expertos para su confirmación, indicó el miércoles el jefe de la policía regional.
En Srinagar, la capital de verano del Cachemira indio, el Lashkar rechazó estas acusaciones y condenó "esas masacres inhumanas".
Las autoridades indias se mostraron reticentes a atribuir los últimos atentados públicamente y con su nombre a grupos terroristas. India y Pakistán, que se disputan el territorio de Cachemira, iniciaron un diálogo de paz en 2004.