El matrimonio McCann ya no está en el punto de mira de la policía. Tras meses como sospechosos de la desaparición de su hija de cuatro años, los investigadores creen ahora que la pequeña Maddie fue asesinada por un pedófilo.

Esta conclusión nace después de que la semana pasada se diera un nuevo giro en la investigación que propició la declaración de un testigo que aseguró haber visto a Robert Murat y a su novia junto a Madeleine dos días después de su desaparición. Ahora los allegados de Murat acusan a los McCann de haber filtrado estas informaciones a los medios para inculparle y así, dejar de ser sospechosos.

Las investigaciones policiales apuntan a que la pequeña Madeleine fue secuestrada y asesinada por un pedófilo. Esta es la conclusión a la que han llegado las fuerzas de seguridad después de los últimos estudios del caso y tras considerar que la niña, desaparecida hace ya seis meses, está muerta, debido a la publicidad que sus padres han dado al suceso, y que habría ejercido presión sobre sus secuestrador.

Así, el detective encargado del caso en el país vecino, Paulo Rebelo, recreó para el periódico luso 'Público', en una información recogida por otr/press, lo que supuestamente sucedió la noche del 3 de mayo, cuando Maddie despareció. "La niña tubo que ser silenciada y hubo violencia, probablemente se la asfixió y de esta forma se produjo la muerte". Ésta era una teoría que ya se había barajado en un principio, pero que "en las últimos registros ha comenzado a ganar fuerza", apuntó y añadió que todo este episodio "tuvo que ocurrir en apenas unos minutos y el secuestrador huyó tan rápido como pudo", señaló Rebelo.

Ahora, con este nuevo giro en la investigación los McCann pueden respirar tranquilos, al menos porque ya no están en el punto de mira de la policía. Sin embargo el matrimonio no está de acuerdo con la idea de que su hija esté muerta. De hecho, dicen que confían en las informaciones de 'Método 3', la agencia de detectives barcelonesa que contrataron de forma privada, y cuyos detectives aseguran que Madeleine está viva y que están muy cerca de su secuestrador.

Pero, aunque ya no son sospechosos en este caso, los padres de Maddie ven ahora como el entorno de Robert Murat les acusa de haber filtrado información a la prensa, unas declaraciones que inculpan a Murat y que, según ellos, sólo utilizan para que la gente se olvide de que las fuerzas de seguridad los implicaron en el suceso. "Estos continuos ataques sin fundamento lo que intentan es desviar la atención y que se investigue lo que ellos quieren", subrayó un amigo del inglés.

Los familiares del sospechoso, se refieren con esto a las informaciones que aparecieron en los medios la pasada semana y en las que un testigo afirmaba haber visto a Murat y a su novia Michaela Walczuch con la niña en Portugal, dos días después de su desaparición. Ante esto, Walczuch quiso aclarar que las declaraciones son falsas y para ello señaló que ella se encontraba en una iglesia de los testigos de Jehova en la localidad lusa de Portimao, y no en Lagos como aseguraban los medios.

Por su parte, el portavoz del matrimonio, Clarence Mitchell, alegó que ellos siempre "están muy preocupados de los detalles que salen a la luz pública", porque es lo mejor para su hija. Además, explicó que están muy tranquilos después de que la policía no encontrara pruebas de las acusaciones contra los McCann que aseguraban que ellos vendieron a su hija a un pedófilo.