Lo hicieron participantes de la edición de este año del Coloquio de IDEA. Señalaron que la lucha contra la corrupción requiere de políticas "claras y de largo plazo"
Diversos participantes de la edición de este año del Coloquio de IDEA coincidieron en afirmar que la lucha contra la corrupción requiere de políticas "claras y de largo plazo".
En un panel sobre el tema corrupción, en el marco del 43 encuentro empresario, el presidente de Quickfood, Luis Bameule, expresó que "mucho de lo que hemos vivido en estas décadas ha tenido que ver no con la falta de normas, sino con el exceso de
normas".
En ese sentido, ejemplificó que un tributo "distorsivo" como el impuesto al cheque "estimula la corruptela" y "trabajar en negro", mientras mencionó que "la debilidad de nuestras instituciones" incentiva la generalización del fenómeno de la corrupción.
Por su lado, el senador chileno Andrés Allamand Zavala sostuvo que "el mal argentino" en materia de corrupción "es el déficit institucional", y alertó que "no hay
manera de combatir efectivamente" ese flagelo si éste es reflejo de un sistema "débil".
Por lo tanto, instó a los argentinos a "retomar el rumbo", al indicar que "es completamente distinto volver a ser lo que uno ha sido que empezar de cero".
"Si queremos mirar la corrupción tenemos que mirar primero el sistema político y el sistema económico", remarcó Allamand Zavala.
El senador trasandino mencionó que "las diferencias de corrupción entre Chile y Argentina" no están originadas en "la materia prima", sino en "el déficit institucional" que presenta este último país.
Allamand Zavala señaló que "las instituciones son las que, en definitiva, generan los incentivos para la interacción y para comportamientos humanos, y cuando los incentivos son débiles se prolifera la corrupción".
"Si hay mala política hay mala calidad de las instituciones. Si hay mala calidad de las instituciones no se puede combatir la corrupción", expresó el legislador chileno.
Agregó que "cuando el sistema económico está bien estructurado, tiene buenas normas y eso, en definitiva, va a arrinconando a la corrupción".
En la misma línea, reconoció que "la corrupción en Chile está aumentando", y recomendó "disminuir al máximo la discrecionalidad normativa, que es lo que nutre" al flagelo.
"Creo poco en los organismos y las fiscalías del Estado (para combatir la corrupción). Yo prendería la luz y haría que la sociedad civil pudiera estar realmente atenta y vigilante", propuso Allamand Zavala.
Finalmente, parafraseó al pensador español José Ortega y Gasset con su célebre frase pronunciada en 1939, cuando arengó "¡Argentinos, a las cosas!", aunque el senador chileno le agregó: "y a las instituciones".
Y, por último, el asesor principal de políticas de la Oficina de Integración Institucional del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Roberto de Michele, aseguró que el combate a la corrupción tendrá resultados positivos cuando exista "la
voluntad de hacer de esto un esfuerzo colectivo".
Además, sostuvo que "la información es el recurso estratégico para reconstruir la confianza entre el Estado, el sector privado y la sociedad civil", en el marco de la lucha contra el flagelo.
"La confianza personal es muy importante en la familia y las amistades, pero el Estado necesita otro tipo de confianza, que no se basa sólo en reglas, sino en comportamientos y prácticas".
De Michele estimó "muy importante que las reglas tengan presión social, si no, no sirven, porque la demanda de la sociedad hace que las reglas formen parte de la vida cotidiana".
Enfatizó que no habrá éxito en esta lucha si no participan todos los sectores, al asegurar que "nada de esto va a ocurrir a menos que tengamos la voluntad de hacer de esto un esfuerzo colectivo".