El presidente de la Comisión de Obras Públicas de Diputados señaló que “el Estado debe intervenir en la acumulación de ganancias escandalosas”
El diputado kirchnerista y presidente de la Comisión de Obras Públicas de la cámara baja, Edgardo Depetri defendió la decisión de rescindir el contrato de Aguas Argentinas porque “la empresa Suez incumplió todos los contratos del pliego de concesión y que puso en riesgo la salud de la población. Se puso fin a un saqueo escandaloso de los recursos del patrimonio público y es un mensaje para todas las empresas privatizadas”.
Agregó que “la Argentina vivió un proceso de privatización en el que los sectores económicos más concentrados se hicieron cargo de los sectores rentables del estado nacional” y apuntó que Suez “ni nadie puede aducir que el problema son las tarifas, productividad o mano de obra”.
“Lo que hay en discusión con las empresas privatizadas es su alto nivel de rentabilidad y ganancias. No quieren discutir la propiedad y no asumen que este es un servicio público, de derecho colectivo”, afirmó.
Depetri afirmó que “el gobierno tiene la firme decisión de que el Estado tenga una presencia más clara y contundente en la economía nacional” y puso como otro ejemplo el caso de la empresa petrolera Repsol-YPF que “de los 2.600 millones de dólares que ganó el año pasado en todo el mundo, 1.300 salieron de la Argentina”.
“¿Acaso el gobierno argentino no tiene la posibilidad de intervenir en esta lógica de acumulación escandalosa?, se preguntó el legislador del Frente para la Victoria y dirigente de la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), en una entrevista con el programa Asteriscos, que se emite por P+E.
Precisó que Repsol “tiene un costo por barril de 6 dólares y lo vende a 46 o 47. ¿vamos a dejar que la irracionalidad de los grupos económicos y de las privatizadas se lleven por su lógica de ganancias y pongan el precio que quieran?”.
Depetri negó conocer un plan para renacionalizar la empresa `petrolera pero destacó que existe “una decisión de que el Estado intervenga cada vez más claramente en la política económica de la Argentina,. Hay que discutir la propiedad, esquemas de asociaciones… Enarsa puede involucrarse en asociación con PDVSA, Petrobras y capitales privados para aumentar las reservas, cómo ampliamos la producción y reservas”, ejemplificó.
“Esta demostrado que, cuando el Estado no interviene claramente en un control sobre el proceso de acumulación y distribución de la riqueza nacional, los empresarios hacen lo que quieren. No dicen que están ganando mucho y pueden aumentar los sueldos, sino que con una lógica perversa plantean que los sueldos generan inflación”, apuntó.
Marcó como diferencia que “las empresas privatizadas tuvieron dirigentes como Carlos Menem o como Ricardo López Murphy que querían dolarizar la economía nacional; pero hoy hay un presidente que no responde a esos intereses sino al interés del pueblo”.