La camiseta que llevó George Best el día que marcó seis goles para el Manchester United contra el Northampton en la Copa de Inglaterra de fútbol en 1970, alcanzó los 35.000 euros en una venta de la casa de subastas londinense Christies.
Ese día, "incluso el Muro de Berlín" no habría podido frenar a la leyenda del fútbol norirlandés, fallecido el 25 de noviembre de 2005 después de una larga batalla contra el alcoholismo, contó a la agencia británica Press Association el guardameta del Northampton de la época, Kim Book.
La camiseta fue adquirida en 1996 por el ganador de un juego organizado por un periódico. Su nuevo propietario permaneció en el anonimato.
Además de ser uno de los más grandes jugadores de la historia, George Best es la primera "pop-star" verdadera del fútbol, multiplicando las travesuras y las provocaciones con los partidos inolvidables.
Famoso por sus gambetas, lo era también por sus declaraciones iconoclastas: "Gasté mucho dinero para empinar el codo, en muchachas bonitas y en coches rápidos. El resto, lo derroché".
Después de su muerte a la edad de 59 años, los norirlandeses, católicos y protestantes, le habían honrado con funerales nacionales, con 100.000 personas siguiendo sus restos mortales por las calles de Belfast.
En mayo, el aeropuerto de Belfast fue rebautizado "aeropuerto George Best".