Italia le puso brillo al arranque de la Eurocopa 2021 goleando a Turquía 3 a 0, por el Grupo A, en el estadio Olímpico de Roma.

Merih Demiral en contra, Ciro Immobile y Lorenzo Insigne, todos en el segundo tiempo, anotaron para el renovado equipo de Roberto Mancini.

De principio a fin Italia estableció su dominio y control ante un rival que agrupó jugadores en su campo y casi ni pensó en contragolpear. Además de su juego, la Azurra tuvo la virtud de no impacientarse, ni desesperarse.

Italia, con mucha dinámica y movilidad, buscó abrir espacios ante el cerrado esquema defensivo de Turquía. Desprendió a los defensores, sumó a los volantes, busco desequilibrar con Insigne y Berardi, intentó distintas variantes pero no consiguió socavar la firmeza de la sólida defensa turca en el primer tiempo.

La chance más clara fue un cabezazo de Giorgio Chiellini, uno de los escasos sobrevivientes de la vieja guardia, que motivo una excepcional reacción del arquero turco, Ugurcan Cakir, para desviar con una mano por encima del travesaño, a los 23 minutos.

En el segundo tiempo se mantuvo el dominio “visitante” -se jugó en Roma, pero la localía correspondió a Turquía- y llegaron los ansiados, y merecidos, goles. En contra, el primero: pase exacto de Locatelli a Berardi, quien ingresó por la derecha al área y mando el centro atrás; la pelota pegó en Demiral y se metió en su arco, a los 7 minutos.

Nada cambió tácticamente con la apertura del resultado: Italia siguió atacando y Turquía siguió defendiendo. Y a los 20 minutos llegó el segundo festejo: fuerte disparo de Spinazzola, Cakir rechazó y el rebote quedó a la medida del remate corto al gol de Immobile.

Una mala salida del arquero Cakir, motivó tres pases, de derecha a izquierda, de los italianos y el disparo, disparado por el pie derecho y abierto de Insigne, que entró cerca de un palo, a los 33 minutos.

Así Italia arrancó con el pie derecho y ratificó su condición de favorito en este Grupo A, que se completa con Gales y Suiza, que jugarán mañana.

Antes del partido hubo ceremonia de apertura a cargo de Andrea Bocelli y Bono, y luego estallido de fuegos artificiales.