Independiente se permitió una leve sonrisa, en un torneo con más tristezas que alegrías, al cortar tres partidos sin victorias y goleó a Olimpo 3-0
Aprovechó los errores de su rival y le ganó por 3 a 0 a Olimpo, que se hunde en el promedio y quedó apenas unas centésimas por encima de Tigre, ubicado en zona de descenso directo.
El equipo rojo, vestido ayer completamente de azul, se impuso claramente bajo un intenso diluvio que se desató en el estadio Libertadores de América, a partir de las facilidades que le otorgó la última línea del conjunto bahiense.
Olimpo no puede repetir los errores de ayer, de lo contrario penará demasiado para mantener la categoría. Por ahora está sufriendo y no es casualidad. Lleva cinco encuentros sin triunfos.
Los goles de Independiente fueron consecuencia de esas equivocaciones. Por ejemplo, en el primero, Emir Faccioli le erró a la pelota en el primer palo cuando intentó rechazar y permitió que Tuzzio, ingresando por el segundo, empujara el balón al fondo de la red.
Hasta ahí el encuentro había sido parejo, con pocas emociones, aunque Olimpo se mostró siempre más cauteloso.
La segunda conquista de Independiente tuvo similitudes con el de la apertura. Centro desde la izquierda, rechazo mal dirigido hacia al medio del área y remate preciso de Iván Pérez para el 2 a 0.
Ya con Olimpo jugado más en ataque y expuesto a las réplicas, Independiente dio el golpe de nocaut con un disparo de Parra que ingresó arriba Tombolini.
"Seguiré trabajando porque no lo robo nada a nadie", declaró el técnico de Olimpo Omar De Felippe luego de la derrota, descartando una renuncia. El próximo sábado puede tener un choque clave para su futuro y es el de su equipo contra San Martín de San Juan.