El genial Ernesto Sábato, fallecido recientemente a los 99 años en su Santos Lugares de siempre, escribió una obra magistral llamada "Sobre héroes y tumbas", título que contrasta totalmente con lo que puede pasar en un partido de fútbol, pero que sirve para graficar lo que dejó el último superclásico que Boca le ganó a River por 2-0 en la Bombonera.

El "héroe" fue el eterno Martín Palermo, quien está entregando su despedida en un nivel que emociona, por todos los condimentos que tiene su vida, no sólo en Boca, sino también en Estudiantes, la selección argentina y hasta en el Villarreal de España, en donde hizo su excursión europea.

El "Titán" había dicho en la semana previa al superclásico del fútbol argentino que estaba disfrutando de sus últimos momentos en su carrera profesional y que tenía la ilusión y el sueño de despedirse con un triunfo ante River y -porque no- con un gol convertido.

Parece que los 'guionistas' de las historias del fútbol mundial le tienen reservado un capítulo siempre preparado para el "Gran Martín" y cada cosa que anhela se concreta, para su propio regocijo, pero lo que es más notable, para toda esa hinchada boquense que lo idolatra de manera pagana.

Por otro lado están las "tumbas", que si las relacionamos con la muerte, la desolación y la tristeza, le quedan casi "al dedillo" a este presente que afronta River, sumido en el fondo de la tabla de los Promedios, pero no por la mala campaña de este certamen, sino por un sinfín de desaciertos deportivos e institucionales que lo persiguen desde hace tres temporadas.

River transita por una fina línea, demasiado fina, en la que un traspié lo puede hacer caer al abismo sin más, haciendo trizas la centenaria historia de su vida.

El equipo de JJ López no ha podido, en lo que va del torneo, dar vuelta un resultado, apenas pudo empatarle transitoriamente a Vélez para luego caer 2-1 en el Monumental, por lo que si no marca el primer gol, difícilmente pueda quedarse con los tres puntos.

En esta campaña logró estar varias fechas como puntero, pero también perdió cuatro partidos, algunos vitales para reforzar su Promedio del descenso como contra Godoy Cruz (2-1) y All Boys (1-0), ambos siendo local, por lo que su presente no es producto de la casualidad y su futuro se ve incierto, por ser benévolo con la imagen.