Por Adrián Taccone
Balance positivo, mirando al futuro
16 de octubre de 2007
Disputadas las dos primeras fechas de las eliminatorias sudamericanas para el Mundial de fútbol de Sudáfrica 2010, se puede decir sin temor a equivocarnos que el balance de la selección argentina es altamente positivo, y abre un futuro más que promisorio para lo que vendrá.
Dos partidos jugados, uno en casa y otro de visitante, y sendos triunfos, sobre Chile (2-0), con el factor Marcelo Bielsa en el medio, y ante Venezuela por el mismo marcador, en el insoportable calor de Maracaibo.
Arco invicto. Tres goles de pelota parada. Y la confirmación de algunos nombres que Alfio "Coco" Basile tendrá casi con seguridad -de no mediar lesión alguna- en el resto de las eliminatorias.
El dato más sorprendente fue sin dudas el de Juan Román Riquelme, quien no es tenido en cuenta en el Villarreal de España y sin embargo en la selección argentina cumplió con creces, con dos golazos ante Chile y una aceptable performance contra la "vinotinto".
Al igual que en la Copa América de Venezuela, la responsabilidad del juego de creación argentino pasa por su mente y sus pies, pero no está solo, ya que el habilidoso Lionel Messi se muestra como una figura alternativa de alta calidad, aunque debe mejorar en algunos aspectos del juego colectivo.
Carlos Tevez demostró una vez más que es un "jugador de selección", casi haciendo acordar a Claudio Caniggia, un hombre que no importara la camiseta que luciera de su club, siempre quedó ligado a la blanquiceleste de la AFA.
Javier Mascherano es un todoterreno imposible de sacar de cualquier formación titular argentina. Alguna vez un relator señaló que pasarán los años y todos sabremos que la mitad de la cancha seguirá siendo de su propiedad.
La sorpresa de Basile en este arranque fue sin dudas la presencia como primer zaguero central de Martín Demichelis, en lugar del ex capitán y símbolo durante largo tiempo, Roberto Ayala.
El jugador del Bayern Munich demostró aplomo y capacidad para ocupar esa plaza, en dos partidos difíciles para él, pero que los sobrellevó de excelente forma. Como para preguntar los motivos que pudo haber tenido en el 2006 el ex entrenador José Pekerman para no llevarlo al mundial de Alemania.
Las eliminatorias sudamericanas no deben tomarse como un mero "trámite" en el camino hacia Sudáfrica, sino que como bien dijo Basile "ya es el mundial", aunque con un largo proceso de tres años.
Con la capacidad individual se llega a lograr un gran equipo y Argentina cuenta con material para la ilusión y la racionalidad.
Lo que viene por delante será Bolivia y Colombia, en noviembre próximos. Esperemos que todo siga viento en popa.