Los espectadores en Corea del Norte podrían quedarse sin ver el Mundial de fútbol Sudáfrica 2010 en las pantallas de sus televisores debido a la tensión política entre los gobiernos de Seúl y Pyongyang.
Las negociaciones entre la emisora surcoreana SBS, que posee los únicos derechos televisivos de la Copa del Mundo en la península coreana, y el vecino país del norte fueron suspendidas debido a la escalada en el conflicto político entre ambos países.
El director de SBS para el intercambio y la cooperación, Yang Chul Hoon, no descarta sin embargo que la nación vecina transmita el Mundial, ya que cuenta con posibilidades técnicas para hacerlo. "Sabemos que Corea del Norte puede transmitir partidos sin autorización. Ya lo han hecho en el pasado", dijo Yang.
Durante el torneo de hace cuatro años Corea del Sur cargó generosamente con los costos de la transmisión de partidos en el marco de acercamiento de la llamada "política del sol brillante" del anterior gobierno de Séul. SBS y los representantes norcoreanos están en contacto desde el Mundial Alemania 2006 para negociar las condiciones de emisión para Sudáfrica 2010.
Los negociadores de ambas partes se reunieron dos veces en Pekín, la primera durante los Juegos Olímpicos de 2008 y la segunda a comienzos de este año. Las conversaciones debían continuar en abril y mayo de este año, con un marco favorable al haber alcanzado un consenso básico.
"Pedimos poder informar en el futuro desde Corea del Norte, y ellos estaban en principio de acuerdo", dijo Yang. Los siguientes pasos debían ser discutidos en las negociaciones pendientes. A finales de marzo, sin embargo, el conflicto entre ambas naciones por el presunto hundimiento de un buque surcoreano en el mar Amarillo al ser alcanzado por un torpedo de Corea del Norte echó todos los planes por la borda.
Tras una serie de sanciones por parte de Seúl, Pyongyang declaró la interrupción de todos los vínculos bilaterales el 25 de mayo. SBS quiso esperar todavía un poco a ver cómo evolucianaba la situación, ya que tenía que pedir una autorización al gobierno surcoreano para la transmisión de imágenes del Mundial en el vecino país del norte. Ello ya no fue necesario.
"El gobierno nos ha comunicado su posición, según la cual considera inadecuado que SBS transmita en vivo partidos del Mundial en Corea del Norte", dijo Yang. Medios surcoreanos citaron asimismo a fuentes gubernamentales que sostenían que Seúl había decidido que Corea del Norte no contaría con imágenes televisivas a menos que pagara por ello. Así, sostenía la prensa, Pyongyang pagaría también por sus "provocaciones".
Yang lamentó por su parte que no se haya llegado a un acuerdo. "Pero respetamos los intereses nacionales y a la opinión pública", dijo. Ello también regirá para futuras negociaciones de SBS con Corea del Norte, agregó.