La conferencia de prensa del entrenador de Ucrania, Oleg Blokhin, previo al partido del lunes por octavos de final ante Suiza en Colonia, fue interrumpida por falta de un intérprete del ruso a otros idiomas.
Tras unos diez minutos, ningún periodista extranjero se atrevió a plantear preguntas porque no era posible comprender la respuesta. El Balón de Oro 1975, se levantó y abandonó la sala con una sonrisa de satisfacción.
Los peridistas presentes se dieron vuelta para encarar al jefe de prensa ucraniano, Igor Mirochnitchienko, quien, un poco molesto, dijo que él podría "intentar traducir" algunas frases, pero que su nivel de inglés no era el más idóneo para que lo hiciera.
"Era un entrenamiento privado, es al equipo poner un intérprete. No es una conferencia de prensa oficial", señaló un responsable de la FIFA ante las preguntas de los medios de prensa.
La FIFA sólo brinda intérpretes los días de partido, por lo que un periodista rusoparlante es quien hace normalmente la traducción a sus colegas en las ruedas de prensa ucranias.
Ucrania es, sin lugar a dudas, el equipo más misterioso del torneo. A veces, entre dos partidos, sólo Blokhin se dirige a la prensa. En cambio, este domingo, los 23 jugadores y el entrenador suizo estuvieron a disposición de los periodistas.