Todo estaba controlado y era cuestión que pasarán un par de minutos para que Colón se llevara los tres puntos de Avellaneda. Pero Alexis Ferrero cometió un error grave en el momento menos oportuno y posibilitó el agónico empate de Racing que rasguñó un punto con matices más anímicos que futbolísticos.
Antes de ese minuto que decidió el destino del encuentro hubo un partido en el que ambos mostraron sus falencias y confirmaron que están lejos de las óptimas versiones que arrojaron a finales del torneo pasado. En Racing quedó evidenciada una fragilidad defensiva inusitada, además de la carencia de tino a la hora de la posesión de la pelota.
Colón, por su parte, mostró no tener pausa así como también inconexión entre Nieto y Fuertes. Así y todo, ambos equipos tuvieron chances de gol en la primera parte. Primero pegó Racing con una jugada de pelota parada que Martínez casi mete desde el piso y con un remate muy cruzado de Lucero, cuando había quedado en posición inmejorable. El final de ese episodio fue para el visitante que tuvo dos claras en Nieto, bien tapadas por Santillo.
El arquero de Racing tomaría preponderancia en el complemento. Es que un error suyo, fue artífice de la apertura del marcador. Fue tras un violento pero simple remate de Rivarola cuyo rebote fue al centro del área y le dejó servido el tanto a Nieto (habilitado) de cabeza.
Tuvo el tiro de gracia Colón, en una buena jugada de Bertoglio que Fuertes no supo definir. Los de Mohamed equivocaron el camino a la hora de defender la ventaja y empezaron a especular. Racing, al que evidentemente le cuesta hacerse cargo de los partidos, iba por inercia y sin ideas.
Los de Caruso Lombardi eran inofensivos, hasta que Ferrero quiso salir jugando, la pelota se le escapó y bajó al debutante Fariña, para que Ramírez iguale de penal ante su ex club. Un punto por lado y muchas cosas por corregir, también para los dos.