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San Martín goleó al "Rojo", por el chileno Canio
15 de febrero de 2009
El equipo tucumano consiguíó una merecida victoria por 3 a 0 frente a los dirigidos por Miguel Santoro, en uno de los encuentros que forman parte de la segunda fecha del torneo Clausura. Los tres goles fueron convertidos por el delantero Cristian Canío.
En el comienzo del encuentro, todas las llegadas de riesgo fueron para el elenco tucumano, donde Canío, era lo más desequilibrante en el ataque del local y tuvo la chance de abrir el marcador.
Tras un mal pase de Hernán Fredes hacia a tras, el trasandino remató de manera desviada, cuando se encontraba frente al arco defendido por Fabián Assmann.
Por el lado del elenco de Avellaneda, tuvo su chance por medio de un remate de Daniel Montenegro, quien de afuera del área quiso sorprender a Marcos Gutiérrez, el cual dio rebote y casi Federico Higuaín abre el marcador, ante el error del arquero, que tapó en dos tiempos.
La más clara del encuentro fue para el chileno Canio quien luego de recibir un centro por el sector derecho, desvió la trayectoria de la pelota, pero no contaba con la espectacular atajada de Assmann, quien le ahogó el grito de gol a los tucumanos presentes en el estadio, con una estirada muy buena a la izquierda del arco.
De ahí en más fueron más intentos aislados, que llegadas precisas para los dos conjuntos, lo cuales, no eran efectivos.
En la segunda etapa y desde casi el vestuario, Canío recibió un pase en profundidad del recién ingresado Marcelo Perugini, para que el trasandino, ex Cobreloa “fusile” la resistencia de Assmann, quien nada pudo hacer ante el buen remate del delantero.
Esta jugada mostró que el local seguía intentando llevarse los tres puntos, mientras que los dirigidos por “Pepe” Santoro, mostraban la falta de atención en la marca de la última línea del elenco de Avellaneda.
Parecía que lo iba a empatar el visitante, por una jugada de Guillermo Rodríguez quien remató mano a mano contra Marcos Gutiérrez, pero el portero le ahogó el gol, lo que hubiera sido el empate en el encuentro.
Pero a los 17 minutos un tiro de esquina por la izquierda, el mal rechazo de la defensa de Independiente y Canío, quien a pura “guapeza” superó la marca de uno de los zagueros rivales y venció con un potente zurdazo la resistencia de Assmann.
Sin embargo no todas eran pálidas para el visitante, quien se encontró con un “regalo” del árbitro Federico Beligoy, quien vio una falta de Matías Villavicencio sobre Ismael Sosa, la cual existió pero afuera del área, sobre el sector derecho.
En los pies de Montenegro estuvo la chance para descontar en el marcador, pero su remate se fue afuera, justo a la derecha de Gutiérrez, al mismo lado donde el portero intentó atajar la pelota.
Pero apareció otra vez Canío, quien por sobre la salida de Assmann, para desatar la locura y fiesta en el estadio de la Ciudadela. Donde el local sentenciaba el partido, para que los tres puntos se queden en la provincia del norte.
Buen triunfo del conjunto dirigido por Carlos Roldán, quien consiguió una victoria que engrosa el promedio, pensando en el promedio. Además encuentra en Canío un goleador quien demostró en este juego que puede ayudar a lograr el objetivo de este equipo, salvarse del descenso.
Por el lado de Independiente, un panorama complicado, pensando que más allá de la falta de resultados, no cuenta con el peso ofensivo que buscaba su entrenador, sino que además, todo el juego pasa por lo que pueda desarrollar Montenegro y hoy no tuvo una buena actuación.