La fiebre por Beijing 2008 empieza a ascender a ritmo vertiginoso y los beneficiados son los revendedores de entradas. Según informó un periódico chino, un boleto para presenciar la ceremonia inaugural supera los 30.000 dólares.

Un empleado del Bank of China contó al "Beijing Times" que la entidad transfirió una entrada cuyo valor original era de 5.000 yuan (730 dólares) a alguien que pagó al propietario la suma de 210.000 yuan (30.657 dólares).

Aunque las leyes prohíban la reventa a un costo mayor al original, los empleados bancarios están obligados a permitir la operación en la medida que los protagonistas brinden toda la información que se les requiere, señaló al diario el trabajador.

El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Pekín (BOCOG) permite sólo una entrada por comprador para la ceremonia de apertura del evento, el 8 de agosto en el Estadio Nacional. Las normas exigen a los interesados proveer detalles completos sobre su identidad, incluida una fotografía digital para ser grabada en el chip de seguridad que posee el boleto.

La fecha límite para transferir entradas para el acto inaugural fue el lunes, pero pases con similares características de seguridad editados para la ceremonia de clausura pueden ser intercambiados hasta el 30 de julio.

El diario "Beijing Times" cita a una fuente descrita como "familiar con el negocio de venta de entradas", que afirma que muchos boletos correspondientes a la jornada inicial son manejados por mafias dedicadas al rubro.

Algunos revendedores compraron números de documentos de identidad para utilizarlos en la reserva "on line" de pases mientras otros organizaban grandes grupos de personas que se dedicaban a solicitar entradas, agregó el informante.

Desde que el BOCOG puso en práctica su política de venta, aparecieron muchos anuncios en internet ofreciendo la posibilidad de estar en la ceremonia inaugural a cambio de más de 100.000 yuan. Un antiguo residente pequinés confesó al periódico haber vendido su entrada a más de 60.000 yuan.

Además, el diario asegura que los pases para los deportes más populares que existen en el país ya cambiaron varias veces su precio de salida.

Alrededor de siete millones de entradas se llevan vendidas para los Juegos Olímpicos, de las cuales un 40 por cierto fueron dispensadas en China, dejando ingresos inesperados de 140 millones de dólares. Unos dos millones de boletos más fueron destinados al COI, a los anunciantes, dignatarios y televisiones.

Los precios para los eventos de los 28 deportes presentes en Pekín van desde los 30 hasta los 1.000 yuan y para hacer que la cita olímpica sea abordable también por el ciudadano local medio, el 58 por ciento de los asientos tienen un valor igual o menor a los 100 yuan.

Del universo de entradas a la venta, existe un 14 por ciento que fue reservado a los estudiantes con un costo de no más de 10 yuan, consignó la agencia Dpa.