Suecia le asestó un duro golpe al actual campeón de Europa, Grecia, al vencerlo por 2-0, en el partido debut de ambas selecciones en el Grupo D de la UEFA EURO 2008.
El partido, que se disputó en Salzburgo (Austria), se definió con los goles de Zlatan Ibrahimovic y Petter Hansson, para pulverizar las esperanzas griegas.
El seleccionador de Suecia, Lars Lagerbäck, salió con una dupla ofensiva temible, con Henrik Larsson acompañando a la gran estrella Ibrahimović.
Por parte griega, Otto Rehhagel tampoco se guardó nada y alineó a Angelos Charisteas y Fanis Gekas en punta, acompañados desde atrás por los incombustibles Kostas Katsouranis y Giorgos Karagounis.
Tras unos compases iniciales con tímido dominio sueco, llegaron las primeras ocasiones. A los 7 minutos Charisteas remató desde fuera del área pero atrapó bien el meta Andreas Isaksson. Cuatro más tarde respondieron los suecos con una gran volea desde lejos de Anders Svensson que se marchó muy cerca de la escuadra de la portería defendida por Antonis Nikopolidis.
Pero se veía que ninguna de las dos selecciones se encontraba cómoda. Quizás el miedo a una derrota hizo que pasasen los minutos sin apenas oportunidades reseñables, con ambas selecciones más pendientes de no dejar espacios que de buscarlos.
La ocasión más clara de la primera mitad llegó a los 33' en un centro de Olof Mellberg que peinó Ibrahimović mandando la pelota por encima del larguero. Antes del descanso Grecia también lo intentó en un disparo con poco ángulo de Charisteas que detuvo sin problemas Isaksson.
En el descanso Rehhagel dio entrada a Giorgios Samaras en lugar de un desapercibido Gekas. Pero la primera ocasión fue para Suecia en un balón en largo que recibió Christian Wilhelmsson, quien no supo superar en vaselina a Nikopolidis, mandando la pelota fuera. La tónica del choque era la misma, con Suecia algo más voluntariosa pero sin conseguir crear excesivas ocasiones. Sólo una individualidad podía deshacer el empate inicial, y así fue.
A los 67 minutos, Ibrahimović hizo la pared con Larsson y lanzó un zapatazo directo a la escuadra de la portería de Nikopolidis, que nada pudo hacer.
El jugador del FC Internazionale Milano llevaba mucho tiempo sin marcar con su selección y eligió un buen día para volver a ver puerta. Y sin tiempo para la reacción griega llegó el segundo a los 72'. Gran parada de Nikopolidis a remate de Fredrik Ljunberg, pero el balón sale rebotado hacia arriba y Hansson aprovecha la indecisión de la zaga griega para mandar la pelota al fondo de las mallas.
Grecia quedó muy tocado y apenas tuvo argumentos para una posible reacción. Sólo Vassilis Torosidis a cinco de la conclusión y en jugada personal puso a prueba los reflejos de Isaksson, que respondió con acierto. La única mala noticia para los suecos fue la lesión muscular sufrida por Wilhelmsson, que podría decir adiós al torneo.