El máximo dirigente de la Conmebol y los presidentes de nueve asociaciones sudamericanas estarán en Australia para convencer a la FIFA que anule el veto a los partidos de fútbol en la altura.
"El viaje masivo de los presidentes se realiza por una situación muy difícil, justo semanas antes de la reiniciación de las eliminatorias" sudamericanas para el mundial Sudáfrica 2010, dijo Néstor Benítez, vocero de la Conmebol.
Sudamérica quiere que el tema de la altura sea abordado durante la sesión que el comité ejecutivo de la FIFA realizará el 27 de mayo en Sydney. Las eliminatorias se reunudarán a mediados de junio.
La única excepción en el frente sudamericano corresponde a Brasil, que se opuso a jugar en esas condiciones, incluso con periodos de adaptación.
En diciembre pasado, el presidente de la FIFA Joseph Blatter anunció la prohibición de disputar partidos de fútbol en ciudades con alturas superiores a los 2.575 metros sobre el nivel del mar.
Con esa decisión, quedaron fuera de competencia los estadios bolivianos de Sucre, Oruro y La Paz, además del Atahualpa de Quito, en Ecuador.
Sin embargo, había aclarado que se podrían autorizar los partidos si los equipos visitantes realizan aclimataciones de al menos una semana, de acuerdo con el nivel de altura.
Benítez dijo que los directivos plantearán el punto de vista de que "no existe una opinión única y final de los científicos acerca de los eventuales perjuicios que ocasiona la altura en los atletas, según explicaron expertos de Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia".
La Federación Boliviana, la más afectada porque fue marginado su emblemático estadio Hernando Siles de La Paz, ubicado a 3.600 metros, había informado recientemente en Asunción que ningún técnico de la FIFA estuvo en esa ciudad realizando estudios empíricos durante la disputa de torneos locales o de la Copa Libertadores.