Romario anunció su retiro del fútbol, poniéndole fin a una carrera de dos décadas que lo convirtió en uno de los máximos goleadores de todos los tiempos.
El delantero de 42 años le dijo a la edición del viernes del diario O Dia de Río de Janeiro que está fuera de forma y que su condición física no le permite volver a las canchas después de varios meses de inactividad.
"Dejé de jugar. Ya no puedo hacerlo más. No he jugado desde noviembre", dijo Romario en una entrevista exclusiva con el diario.
Sin la velocidad y resistencia de antaño, Romario ahora es una sombra del artillero que fue una estrella con el PSV Eindhoven y el Barcelona, y que condujo a Brasil a su cuarto título mundial en 1994, cuando fue nombrado por la FIFA como el mejor futbolista del mundo.
El año pasado, Romario anotó su gol 1.000, al menos según su propia cuenta, una cifra que sólo ha alcanzado Pelé.
Como jugador y técnico de Vasco da Gama, Romario dijo el año pasado que terminaría su carrera de 23 años cuando fue suspendido cuatro meses en noviembre por usar una medicina para combatir la caída del cabello que contenía una sustancia prohibida.
Cuando un tribunal desestimó el castigo en febrero, hubo especulación de que el ariete podría volver a jugar con Vasco o su ex club Flamengo.
Pero Romario dijo que tiene planes de viajar con su familia por el Caribe y que sólo le interesa su puesto como embajador de la Copa del Mundo de 2014, que se realizará en Brasil.
Señaló que sólo volverá a jugar un partido de despedida.
"Siempre quise terminar (mi carrera) como empecé, sin que nadie se diera cuenta", señaló O Baixinho.
Romario comenzó su carrera profesional con el Vasco en 1981 y dio su salto a Europa en 1988 con el PSV Eindhoven de Holanda.
También jugó con el Barcelona (1993-95), Flamengo, Valencia, Fluminense, Al-Sadd, Miami FC y Adelaide United.
Con la selección brasileña anotó 71 goles en 85 partidos, incluyendo cinco en ocho partidos de Copa del Mundo.