Samoa se despidió de la Copa del Mundo de rugby con su primera victoria, este miércoles en Saint-Etienne, ante Estados Unidos (25-21), mostrando una cara jugadora y unas ganas de ofrecer espectáculo que no compensarán un Mundial por debajo de sus esperanzas.

Estados Unidos, que batalló hasta el último minuto (try en el 80) para conquistar el bonus defensivo, su primer punto en este Mundial, suma su tercera derrota antes de afrontar al líder del grupo A, Sudáfrica, el domingo en Montpellier.

Manu Samoa, considerado como el equipo del Sur del Pacífico con más opciones de hacer un buen Mundial, será quizás el único de los tres que no se clasifique para los cuartos de final, porque Tonga y Fiyi tienen todavía opciones contra Inglaterra y Gales, respectivamente.

Derrotados por los sudafricanos (59-7) e Inglaterra (44-22) pero también por Tonga (19-15), los samoanos se despidieron con una victoria de su entrenador Michael Jones, que abandona su puesto.

En un partido que dominaron durante una hora (22-3 al descanso), los hombres del capitán Semo Sititi mostraron destellos de su legendario olfato y bonitas secuencias de rugby en movimiento, de un extremo a otro, con algunos placajes demoledores, otra de sus marcas de fábrica.

A pesar del frío y de la lluvia en el estadio Geoffroy-Guichard, los samoanos concretaron su victoria con tres tries, mientras que los estadounidenses se dedicaron principalmente a defender, a veces con coraje, a menudo con desacierto.

Estados Unidos se consoló con un try magnífico de su wing Takudzwa Ngwenya (53) cuando jugaban con catorce luchando por la bonificación defensiva, que conquistaron en el último segundo.