Leandro Gracián vestirá la camiseta número 10 de Boca Juniors en la Copa Sudamericana, según se supo esta mañana, horas antes de que la lista de 25 jugadores sea elevada a la Confederación Sudamericana de Fútbol.
El último en usar la camiseta 10 fue Juan Román Riquelme, en el pasado semestre, y después el número no volvió a ser incluido, ya que se esperaba el regreso del actual jugador del Villarreal para que fuese él quien continuara vistiéndolo.
Gracián, recientemente incorporado, utilizó hasta ahora la camiseta número 11, la cual proseguirá usando en el torneo Apertura, ya que es la que le corresponde en la lista presentada ante la AFA para la competencia local.
Boca debe confirmar la lista de buena fe para la Copa Sudamericana a 48 horas de su debut frente al San Pablo, de Brasil, previsto para el próximo miércoles, en La Bombonera, en encuentro de ida correspondiente a los octavos de final.
Precisamente, para el choque ante los paulistas el plantel queda concentrado en el Hotel Intercontinental y la nómina de 18 convocados es idéntica a la de la concentración previa al encuentro frente a Banfield, por el torneo Apertura, que Boca ganó por 6 a 0.
Es decir que los concentrados son Mauricio Caranta, Hugo Benjamín Ibarra, Jonatan Maidana, Gabriel Paletta, Claudio Morel Rodríguez, Pablo Ledesma, Sebastián Battaglia, Jesús Dátolo, Leandro Gracián, Rodrigo Palacio, Martín Palermo, Pablo Migliore, Juan Krupoviesa, Alvaro González, Fabián Vargas, Neri Cardozo, Carlos Bueno y Mauro Boselli.
Aunque el director técnico Miguel Angel Russo no lo confirmó, no habiendo quedado lesionados tras el encuentro con Banfield, todo parece indicar que Boca repetirá su alineación titular, con los once jugadores nombrados en primer término.
Con la confirmación de los concentrados quedó descartada cualquier posibilidad respecto de la reaparición de Ever Banega, quien continúa en recuperación por el esguince de tobillo derecho sufrido ante Olimpo, el miércoles 13.
El rosarino cumplió esta mañana, en Casa Amarilla, con un trabajo diferenciado, a las órdenes del kinesiólogo Rubén Araguas, y luego de la sesión de gimnasio se limitó a realizar leves trotes, acompañado por el juvenil delantero Pablo Mouche, quien se recupera de una operación por rotura de ligamentos.
Los demás jugadores desarrollaron ejercicios regenerativos y livianas labores con pelota, quedando pautado el próximo entrenamiento para mañana por la tarde, a puertas cerradas, como ocurre habitualmente en el día previo a cada partido.