Y el gran ganador de la noche es... "Los infiltrados"
Por Sebastián Martínez
“Los infiltrados”, dirigida por Martin Scorsese, se convirtió en la gran ganadora de la 79 ceremonia de entrega de los premios Oscar, que, de todos modos, estuvo marcada por la por cierta paridad a la hora del reparto de galardones.
El filme de Scorsese sobre la mafia de Boston se llevó los premios a Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guión Adaptado (William Monahan) y Mejor Edición (Thelma Schoonmaker).
La película narra la historia de una doble infiltración. Un agente de la policía se mete en las filas de la mafia, mientras que uno de los agentes de la ley trabaja simultáneamente para el crimen organizado.
Más allá de su argumento, el filme destaca por su multiestelar elenco: Jack Nicholson, Leonardo DiCaprio, Matt Damon, Mark Wahlberg, Martin Sheen y Alec Baldwin son algunos de los actores que participan de la película.
Si “Los infiltrados” fue la gran ganadora, la sorpresa de la noche la dio “El laberinto del fauno”, del mexicano Guillermo Del Toro, que se llevó tres Oscar por Mejor Fotografía, Mejor Dirección de Arte y Mejor Maquillaje.
"Pequeña Miss Sunshine" no podrá quejarse de la suerte que le tocó. Si bien no ganó a Mejor Película, se retiró de la ceremonia con dos premios importantes. Alan Arkin fue elegido el Mejor Actor de Reparto y Michael Arndt se lo llevó por Mejor Guión Original.
Pese al premio otorgado a Helen Mirren como Mejor Actriz, para el filme “La reina” no fue una buena noche. Sólo obtuvo una estatuilla de las seis por las que competía. Peor le fue a “Babel”, del mexicano Alejandro González Iñárritu, que con siete posibilidades de llevarse una estatuilla, sólo alcanzó una: la del argentino Gustavo Santaolalla por la Mejor Música Original.
Tampoco le fue muy bien a “Soñadoras”: tenía nueve nominaciones y sólo se llevó dos (Mejor Sonido y Mejor Actriz de Reparto para Jennifer Hudson). De “Cartas desde Iwo Jima”, dirigida por Clint Eastwood, se puede decir lo mismo. Competía por premios grandes (Mejor Película, Mejor Director y Mejor Guión Original), pero debió conformarse con un único premio por Mejor Edición de Sonido.
Estas pobres performances se debieron, en parte, a que uno de los "peces gordos" de la noche se lo llevó "El último rey de Escocia". Su protagonista, Forest Whitaker, se llevó la estatuilla al Mejor Actor.
En cuanto a la Mejor Película en Lengua Extranjera, el premio fue para la alemana “La vida de los otros”, dirigida por Florian Henckel von Donnersmarck, que aborda la problemática del espionaje en Alemania Oriental.
La ceremonia, que comenzó puntualmente a las 22:30 (hora argentina) en el Teatro Kodak de Los Angeles fue conducida por la solvente comediante Ellen DeGeneres. La actriz y actual conductora de un talk-show le sacó jugo al ocurrente guión que se le preparó, en el que no faltaron menciones a la gran cantidad de mexicanos y británicos nominados en esta oportunidad y a la derrota electoral de Al Gore (presente en la sala).
Una sorpresa para la platea argentina que seguía la ceremonia por televisión fue ver, de repente, que Norma Aleandro irrumpía en las pantallas de los televisores. Es que en el repaso que se realizó de las películas ganadoras de los antiguos Oscar a la Mejor Película en Lengua Extranjera se incluyó un fragmento de “La historia oficial”, premiada en 1986.
El momento más emotivo, en tanto, fue el Oscar Honorífico que se llevó el italiano Ennio Morricone, el mítico compositor de algunas de las bandas de sonido más célebres de la historia del cine, entre ellas, las de “Los intocables”, “La misión”, “Cinema Paradiso” e “I como ícaro”, entre muchísimas más. “Espero que este no sea un punto de llegada, sino de partida”, dijo un emocionado Morricone.