No hay demasiado acuerdo sobre lo que significa Roland Emmerich en el panorama actual de Hollywood. Algunos piensan que se trata de un visionario, que le ha devuelto la grandeza al cine norteamericano. Otros, por el contrario, piensan que es un mercader, experto en dilapidar grandes presupuestos en películas caras y obvias.
Cada uno podrá hacerse su propia opinión luego de ver parte de su filmografía, que incluye "El día después de mañana", "10.000 AC", "Godzilla", "El patriota" y la reciente "2012", que aún no se ha estrenado en la Argentina, pero que está recaudando a carradas en los Estados Unidos.
Sin embargo, quizás la película más emblemática de Emmerich sea "Día de la independencia", ese filme de 1996 sobre una invasión extraterrestre que fue protagonizada por Jeff Goldblum y Will Smith.
Tal vez por eso, porque es la película que mayores alegrías comerciales le ha dado, Emmerich ha anunciado que planea hacer una secuela dividida en dos partes. Por el momento, es poco lo que se sabe. Sólo que Will Smith volverá a ser protagonista, que el título provisorio es "ID-4Ever" ("Día de la independencia por siempre", sería la traducción).
“Lo que queremos hacer en el siguiente film –que realmente son dos películas– es contar un arco narrativo más amplio. Ya tenemos la idea: continuar la historia, justo cuando terminó, no sé hace cuanto tiempo… doce, trece, catorce años”, afirmó el director, quien garantiza que el film se desarrollará en nuestro planeta. “Todo gira en torno a la Tierra. Es la que resulta invadida”.
Cabe recordar que si bien "Día de la independencia" fue un éxito absoluto en cuanto a venta de entradas, la crítica la despedazó cuantas veces pudo y en internet se puede leer una extensísima lista de errores de continuidad y lógica en el relato. Así y todo, la cosa funcionó. Y parece que quiere volver.