Por Carlos Nasif
La Rural no se apartó de su rumbo político
2 de agosto de 2008
Cuando Luciano Miguens, presidente de la Sociedad Rural Argentina, señaló que esta muestra de Palermo “es histórica” no se equivocó. La fiesta de inauguración de la 122º Exposición Rural de Palermo tuvo todos los condimentos esperados y no hubo sorpresas.
El discurso de Miguens estuvo a tono con el estilo de la entidad que preside. Recordó que la Rural fue una de las primeras instituciones en alertar sobre el tema inflación. Hace un año el mismo Miguens afirmó que el tema comenzaba a alertar.
“La lucha por la inflación empieza por reconocerla. Es la principal amenaza a la economía nacional, castiga especialmente a los sectores postergados de la sociedad. Hace exactamente un año, desde esta tribuna advertimos sobre la gravedad del problema, dijimos entonces que la inflación se la debe combatir, no esconder”, señaló el dirigente, en medio de un estruendoso aplauso de casi 10.000 personas.
También fue histórica esta ceremonia por otros hechos. Porque las cuatro entidades que participan de la Mesa de Enlace dieron el marco final a la ceremonia, porque el entrerriano Alfredo de Angeli fue el más aplaudido y se dio un gusto grande: ser el primer dirigente que no pertenece a la Rural en hablarle al público desde ese mítico atrio.
Muchos lamentaron las ausencias de Eduardo Buzzi y Fernando Gioino, de la Federación Agraria y Coninagro, porque hubiese sido la fiesta perfecta con sus presencias.
Miguens no tuvo reparos en cargar contra el Gobierno. No sólo tenía argumentos, sino todo un respaldo de su gente y el cuadro político opositor al Gobierno. El titular de la Rural se sentía como pez en el agua a la hora de criticar acciones del Gobierno en contra del sector rural.
Esta in auguración de la muestra rural y la posterior conferencia de la prensa de la Presidente, Cristina Fernández de Kirchner, demuestran que las heridas están muy abiertas en los dos bandos.
Los discursos y el mensaje de Cristina dan cuenta de estar en veredas opuestas, como si no hubieran captado el mensaje de la gente, que se cansó de tanto distanciamiento.
Miguens propuso otra vez el diálogo en unidad, sino entidades separadas que disgregue. Fue contundente y claro en afirmar que no hay posibilidades de retornar al pasado en el que cada institución acudía al Gobierno con sus propio librito. “No aceptamos más intentos de disgregación. En la comisión de Enlace estamos dispuestos al diálogo franco y profundo”, dijo.
Este fue el último discurso de Luciano Miguens como presidente de la Rural. En un par de meses tendrá un sucesor, casi seguro Hugo Luis Biolcatti, un productor lechero, con un perfil diferente al de Miguens.
Pero hubo algo que la Rural no ha perdido a lo largo de su centenaria historia, fuese quien fuera el presidente de turno, y es el rumbo político que la identifica. Y esto quedó una vez más demostrado.